Por tercer año consecutivo, esta arteria penquista se convirtió en un gran paseo cultural al aire libre, con artesanas, artesanos, artistas y editoriales de las 33 comunas del Biobío, en una jornada familiar organizada por la Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio del Biobío.
El festival coronelino, que convocó a destacados artistas foráneos y nacionales, dio cierre a su cuarta edición con obras a gran escala pintadas en diversos puntos de la comuna carbonífera.
Cuadro estudiantil anunció la vuelta de dos históricos y un escolta estadounidense de larga trayectoria para este importante torneo.