El doctor Marco Sandoval, advierte que 60% de los suelos de Chile están degradados, pero es un problema infravalorado. El sustento para la vida, cultivos, alimentos y economías tiene una resiliencia que le permite seguir funcionamiento, aunque con la intervención humana, incendios y eventos extremos se erosiona y daña su calidad y roles como demuestra la evidencia. Recuperar, mejorar y conservar es un reto urgente para asegurar el desarrollo y bienestar local.
El 75% de las nuevas afecciones tienen origen en animales y más contacto con especies domésticas y silvestres, incendios forestales, cambio climático y pérdida de biodiversidad suben cada vez más el riesgo de contagios. “En nuestra zona se dan las condiciones para que florezcan y se mantengan muchas enfermedades zoonóticas”, afirma la académica UdeC Paula Gädicke. Hanta, rabia e hidatidosis son graves ejemplos que nos afectan hoy.
Dirigido a enfrentar la escasez hídrica, incendios forestales, marejadas e inundaciones, la iniciativa posicionaría a la zona como un referente nacional en resiliencia medioambiental.