Con trabajos de limpieza de canales, vigilancia de taludes dañados por siniestros del verano, y en algunos casos la habilitación de albergues, son parte de las medidas que toman las autoridades comunales y regionales para enfrentar el evento descrito por la Dirección Meteorológica de Chile.
Continúan las acciones preventivas para evitar desprendimientos de tierras desde los cerros, sobre unas de las carreteras más peligrosas de la Región. Desde el MOP, informaron que los trabajos se extenderán hasta mayo.
Ante el riesgo de deslizamientos y remociones en masa. Lluvias más intensas podrían barrer con la capa vegetal existente y provocar rodados. Especialistas afirman que además hay riesgo de inundaciones y que eventos meteorológicos serán cada vez más extremos.