Cuando se vive bajo una oligarquía de este tipo, siempre surge alguna crisis que tiene prioridad sobre asuntos aburridos como la atención sanitaria o la contaminación.
A sus 33 años, la viñamarina se consagró campeona por cuarta vez del Mundial de BMX, esta vez en Bélgica. Una deportista que merece más aplausos y muchísimo más apoyo para competir.