La Comisión de Vivienda y Urbanismo del Congreso continuó con la discusión del proyecto que modifica la Ley General de Urbanismo y Construcciones, con el fin de exigir medidas de seguridad en departamentos habitados por menores de 12 años, como la instalación obligatoria de mallas de protección en ventanas, proyecto que nace tras la lamentable tragedia de Valentin, menor que perdió la vida tras caer de un edificio en altura en San Pedro de la Paz.
Durante la sesión, participaron representantes de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) y de la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios, quienes expresaron reparos al proyecto en trámite. Orlando Sillano, vicepresidente de la CChC, propuso que las medidas de seguridad se regulen a través de los reglamentos de copropiedad y no mediante una exigencia legal directa, para evitar un aumento en los costos de las viviendas.
Sillano subrayó que la responsabilidad de instalar mallas de seguridad debe recaer en los propietarios, y no en las constructoras. También recalcó que estas medidas deben ser duraderas, fiscalizables y adaptables a cada caso, evitando que se genere una falsa sensación de seguridad, ya que los propietarios podrían retirar las mallas tras recibir la vivienda.
Desde la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios, su director ejecutivo Slaven Razmilic también expresó su rechazo a la obligatoriedad de las mallas, argumentando que no todas las viviendas presentan el mismo nivel de riesgo. Indicó que hoy hay una menor proporción de hogares con niños en comparación a décadas anteriores, por lo que la medida sería ineficiente y generalizada.
Razmilic propuso alternativas como diseñar viviendas con mayor altura de ventanas, permitir la instalación voluntaria de mallas y garantizar que las normas de copropiedad no lo impidan. También advirtió que las mallas podrían dificultar evacuaciones en caso de emergencia y afectar la estética de los edificios, por lo que deben evaluarse con criterios técnicos y flexibles.
Pese a las críticas, ambas entidades coincidieron en la importancia de prevenir accidentes en el hogar, especialmente en entornos con niños. Sin embargo, llamaron a que el proyecto de ley no imponga medidas universales, sino que entregue herramientas normativas adecuadas para que cada comunidad o propietario pueda implementar soluciones ajustadas a su realidad.