La autoridad ratificó que la decisión política del gobierno es lograr su concreción. No obstante, se sigue dialogando por las otras iniciativas con las cuales el viaducto “conversa”.
En sendas entrevistas con este medio, el gobernador regional, Rodrigo Díaz, y la delegada presidencial, Daniela Dresdner, se refirieron a uno de los proyectos más emblemáticos de la Región, como lo es el Puente Industrial.
Y si bien ambos manifestaron la necesidad de su realización, hubo matices en sus respectivas opiniones.
La delegada presidencial, por ejemplo, comentó que “nuestra ciudad necesita el Puente Industrial y, además, se necesita hace varios años. Pero este tipo de desarrollo no puede ser a costa de todo. Ahí hay un problema, cómo se va a hacer y qué tipo de puente va a ser, y es importante que no afecte el humedal. Lo que hay que hacer es buscar soluciones que consideren el medioambiente, las comunidades aledañas y que, al mismo tiempo, considere el desarrollo”.
Agregó que “no creo que estas cosas no sean compatibles, pero por alguna razón no se han hecho los esfuerzos para compatibilizar”.
En dicha ocasión, la delegada Dresdner fue consultada al respecto, por las reuniones que había sostenido con la agrupación “No al Puente Industrial”.
Díaz, en tanto, manifestó que “se habla de un problema ambiental, y toda obra humana, es mejorable. El ministerio de Obras Públicas debe aprender que no puede construir con terraplén sobre humedales y tiene que dar otras soluciones”.
Entonces, comentó que “no es solo un problema de congestión, porque ello genera un montón de gases invernadero producto de horas y horas de personas que están atoradas; genera problemas de mala calidad de vida. Y ese problema lo viven medio millón de personas y no hay ninguna posibilidad real, a la mano, de resolver ese problema si no se realiza el Puente Industrial”.
Así como otras iniciativas en el Biobío, del Puente Industrial se viene hablando hace muchos años. De hecho, en la página web de la concesionaria a cargo de los trabajos, se comenta que data de los años ‘70, “siendo considerado desde aquel entonces como una obra de infraestructura pública necesaria para el desarrollo urbano regional”.
Pero, claro, con los actuales problemas de congestión que afectan a buena parte de las comunas de la provincia de Concepción, el viaducto vuelve a cobrar relevancia.
“El Puente Industrial es una obra imperativa desde la perspectiva de la planificación regional, siendo incluida en el Plan de Obras Públicas para el Gran Concepción desde diciembre del 2006”, dice en la mencionada página web.
Consultado sobre el tema, el jefe de la División de Infraestructura y Transporte del Gobierno Regional (Gore), Óscar Ferrel, comentó que “el Puente Industrial es una obra de envergadura, son más de $200 millones de dólares y tiene su Estudio de Impacto Ambiental aprobado, por eso buscamos que se ejecute a la brevedad posible, porque si bien no va ser una solución definitiva, va a traer una solución parcial y hay que ocuparla, para disminuir los tiempos de viaje y mejorar la calidad de vida de la gente”.
En su opinión, las discusiones “son parte de las etapas preliminares de los estudios de ingeniería, de las prefactibilidades, pero cuando ya hay un proyecto financiado, lo que corresponde es empujarlo, para que se ejecute con la brevedad posible, en forma y tiempo”.
A juzgar por lo manifestado por el seremi de Obras Públicas, Hugo Cautivo, el proyecto se concretará de todas maneras, y son otras las dudas que surgen en torno a la iniciativa.
“Es un proyecto esencial, no solo por la infraestructura logística de la Región. Lo fundamental tiene que ver con un grado de conectividad mayor. Necesitamos más rutas (…). Para precisar, no hay temas pendientes con el puente. Lo que hay que ver es cómo esta infraestructura conversa con otras iniciativas que hoy se están diseñando, de tal forma que no tengamos problemas, por ejemplo, con una de las orejas y su conexión con con la costanera sur”, manifestó Cautivo.
El seremi explicó que, tal como lo mencionó Ferrel, el proyecto del Puente no tiene temas pendientes respecto de permisos, pero desde la cartera siguen escuchando a las autoridades locales y a las comunidades. “El ministro nos ha dicho que tenemos que ser capaces de escuchar los dolores de las personas”, comentó.
Son particulares las conexiones que el proyecto tendrá en las comunas de San Pedro de la Paz y Hualpén. De hecho, hace unos días Cautivo se reunió con el alcalde Javier Guíñez, y consejeros regionales, que le consultaron por la iniciativa.
En ese punto, comentó que la denominada Ruta Pie de Monte en San Pedro de la Paz, “conversa” con el viaducto, pero debido a las observaciones que Contraloría efectuó al Plan Regulador Metropolitano de Concepción (Prmc), eso está detenido. Y es ahí donde caben las conversaciones que se siguen desarrollando, mientras los trabajos del puente, que debería estar listo durante el primer semestre de 2024, se continúan desarrollando.
“El lugar donde se realizan las obras no tienen que ver con una decisión antojadiza del MOP, sino con los instrumentos de planificación y se tiene que cumplir sí o sí. La normativa medioambiental, por cierto, no se puede pasar por alto. No nos mandamos solo”, manifestó.
Agregó que, si bien hay un concesionaria que está a cargo de las obras, el MOP no puede desligarse de su rol fiscalizador, considerando que la inversión del proyecto es del Estado. “Hualpén tiene un reclamo por las obras de compactación que han generaba polvo en suspensión, y se inició una investigación. Y este acompañamiento a la obra es hasta el final”, aseguró la autoridad.
Cautivo también destacó la importancia que tendrá el puente en ayudar a disminuir la congestión vehicular. “Quienes vengan de la provincia de Arauco, por ejemplo, podrán evitar pasar por Avenida Pedro Aguirre Cerda”, contó.