Acusan personalismo del mandatario y cambios en la estrategia que venía realizando el Ejecutivo en administraciones anteriores y que incluye la salida de pactos que fueron promovidos por la nación.
Movidas en materia internacional han sido las últimas semanas de la administración del presidente Sebastián Piñera.
Y es que el viaje que realizó a Cúcuta para entregar ayuda humanitaria para Venezuela en compañía de su par colombiano, Iván Duque y el presidente encargado de la nación caribeña, Juan Guaidó. Esto sumado al apoyo que entregó Piñera a quien se desempeña como preside la Asamblea Nacional de ese país.
A esto, debemos sumar la cumbre del Prosur, que se realizó el 23 de marzo en Santiago y que fue organizado y liderado por el Presidente Piñera.
Recordemos que este organismo viene a reemplazar a la antigua Unasur, creada por países sudamericanos en el año 2004, pero como la Comunidad Suramericana de Naciones (CSN) y recién en 2010 comenzó a funcionar como tal, siendo Néstor Kirchner el primer secretario general de la instancia.
Lo anterior se suma a la salida de Chile del pacto de Escazú y el pacto migratorio que fue promovido por Chile en Naciones Unidas.
Lo anterior ha hecho que desde el mundo político surjan críticas a los lineamientos políticos que tiene la actual administración. Es por esto, que mañana el mandatario se reunirá con el Consejo Chileno para las Relaciones Internacionales, que es un organismo autónomo que promueve el debate en materia de relaciones exteriores.
Entre los críticos se encuentra el senador y ex canciller José Miguel Insulza, quien, en conversación con Diario Concepción, manifestó que “a Cúcuta no fue ningún funcionario de la Cancillería, un problema de este país es que tiene un muy buen ministro de RR.EE que es Sebastián Piñera, un buen ministro de Hacienda que es Sebastián Piñera, un ministro del Interior que se llama Sebastián Piñera, por lo que es difícil atribuir responsabilidad a los ministros”.
Siguiendo esa misma línea, el diputado Gastón Saavedra acusó que el Presidente Piñera tiene un “excesivo personalismo, tenemos un presidente que es ministro de todo y no un director de orquesta. Cuando cambie de estilo, vamos a tener un cambio en las políticas internacionales distintas y no tan concentradas en el culto a la persona”.
Mientras que la diputada Francesca Muñoz comentó que “Es bueno que Chile figure como un referente en la región marcando un liderazgo en cooperación, integración y defensa de la Democracia y el respeto a los Derechos Humanos. Se ha seguido una línea íntegra y con decisiones acertadas para la promoción de estas materias.
Desde la academia la visión tampoco es muy positiva, puesto que durante la actual gestión existe un cambio en la forma de trabajo.
La abogada, académica y directora del Programa de Estudios Europeos de la UdeC, Paulina Astroza, explicó que todas las administraciones habían seguido una línea estable en materia internacional, pero “se ha roto esta continuidad y de forma muy criticable, por ejemplo, con los pactos en donde fuimos muy activos. Chile ha sido impulsor de varios de ellos y los argumentos que se dan son discutibles. Lo que pasó con Venezuela también es discutible, por la politización que se ha hecho en la entrega de la ayuda, además de otras polémicas”.
Mientras que la socióloga, académica de la Usach y experta en temas Latinoamericanos, Lucía Dammert, comentó que “la política internacional de este gobierno genera preocupación dado que en los últimos meses se han visto cambios y zigzagueos en lo que era tradicionalmente en una mirada a largo plazo, como la firma de los tratados de Escazú y migratorio. No hay nada sobre relaciones con países estratégicos como Perú y Bolivia y hay una percepción de debilidad en la mirada a largo plazo en la Cancillería y eso también genera preocupación.