El Pontífice retira de la vida pública a Carlos Pellegrin, en medio de cuestionamientos a su rol en las denuncias en contra de seis sacerdotes, y ocurre una semana después del allanamiento que realizó el fiscal Emiliano Arias.
El Papa Francisco aceptó la renuncia de dos nuevos obispos de la Conferencia Episcopal de Chile; se trata de los obispos de Chillán y San Felipe, Carlos Pellegrin y Carlos Contreras. Su salida se produce en medio de cuestionamientos por investigaciones secretas por parte de la Fiscalía, vinculadas a presunto abusos de menores y eventuales encubrimientos.
Tanto Pellegrin como Contreras conocían hace cerca de dos semanas que el Pontífice había aceptado su salida. En reemplazo fueron nombrados Sergio Pérez de Arce en Chillán y Jaime Ortiz de Lazcano en San Felipe.
Tras conocerse la noticia, al mediodía de Roma, 6:00 horas en Chile, en la capital de Ñuble comenzaron una serie de movimientos al interior de las instituciones ligadas a la Iglesia.
A las 9:30 horas, todos los miembros de la diócesis de San Bartolomé de Chillán se dieron cita en la Casa Tabor, en donde conocieron al reemplazante de Pellegrin.
Durante una conferencia de prensa, dada al medio día, Pellegrin agradeció a los chillanejos por su colaboración con la justicia y se mostró sorprendido por la investigación judicial en su contra. “No sé de qué se me acusa, hoy (ayer) los medios locales publicaron que hay 40 días más de secreto en la investigación. Yo ahora me retiraré y prepararé mi defensa”, señaló
Durante la conferencia de prensa, Carlos Pellegrin anunció acciones legales en contra de todas las personas y medios de comunicación que han proferido denuncias en su contra. “Si ustedes revisan, todas las denuncias y juicios canónicos son durante este último periodo, y eso no debe descalificar estos 12 años de gestión. Teníamos una forma de actuar muy distinta, por eso, nos hemos abierto a los medios de comunicación. Yo nunca he encubierto un delito y tengo mi conciencia muy limpia”.
Pellegrin adelantó que una vez resuelta su situación judicial, iniciará acciones legales en contra de sus actuales acusadores. “Por el momento me reservo a denunciar a aquellos que injustamente me han denunciado; uno no se puede liberar del sentimiento de justicia y me reservo el derecho en contra de muchos que me han injuriado, incluyendo a los medios de prensa. Yo voy a pedir justicia para mí”.
Mientras que el administrador apostólico de Chillán, Sergio Pérez de Arce, indicó que es un fuerte desafío y que pretende sacar el estigma que tiene la diócesis. “Uno cuando llega a una diócesis debiera entrar en todas las tareas pastorales apostólicas, pero obviamente el tema de la crisis de la iglesia y del manejo de los abusos, requiere una atención especial hoy en día, para que la gente, la sociedad, el pueblo de Dios, sienta que estamos abordando estas temáticas con verdad, con transparencia y con búsqueda de la justicia”.
Pérez de Arce comprometió toda la ayuda necesaria para esclarecer los casos de abusos y anunció política de puertas abiertas. “No hay un detalle, pero hay una voluntad de hacerlo, porque si tú vez la carta de los obispos que sacaron con la última asamblea plenaria y ver lo que el papa está diciendo. Claramente hay un deseo, voluntad, compromiso de hacer las cosas de manera distinta a las que se estaban haciendo”, precisó.
Por cerca de una hora estuvo reunido el Papa Francisco con el arzobispo de Concepción, Fernando Chomali.
El encuentro comenzó al medio día de Roma y fue a la misma hora en la que se conocía la salida de Pellegrin y Contreras.
Tras la cita, Chomali manifestó: “Le expresé nuestra decidida colaboración y empeño para terminar con los abusos y generar una sociedad más respetuosa de los derechos humanos. Pude interiorizar la situación en la que se encuentra la Iglesia después de su visita a Chile, en relación a las denuncias por abuso y a los allanamientos de la que ha sido objeto”.
A lo anterior, sumó que nuevamente presentó su renuncia ante el pontífice y las razones para ello, la que no fue aceptada. “El Santo Padre me animó a continuar con el decidido impulso que la Arquidiócesis le ha dado al trabajo con los más postergados de la sociedad”, recalcó.
El líder de la iglesia penquista confirmó una reunión con el oficial de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Jordi Bertomeu, uno de los encargados de confeccionar el informe Scicluna y una de las personas que más ha ayudado al Papa frente a la crisis que vive la Iglesia chilena.