La Fuerza Aérea confirmó el hallazgo de unos trozos de esponja que podrían pertenecer al avión Hércules C-130, el cual desapareció en su viaje hacia la Antártica, con 38 personas a bordo, el lunes pasado. Un barco brasileño habría encontrado otros restos posiblemente asociados.
De acuerdo al comunicado de la FACh, los restos fueron hallados 30 kilómetros al sur del punto donde hubo un último contacto con la aeronave, a dos días de iniciada la búsqueda.
Dichas esponjas corresponderían a parte de los materiales usados en los estanques de combustible, por lo que, tras ser recuperadas, serán sometidos a peritajes que descarten o confirmen si eran parte del avión siniestrado.
Con posterioridad a lo informado por la FACh, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, publicó en Twitter que un buque de su país recolectó “objetos personales y restos compatibles” con el Hércules C-130, a 518 kilómetros de Ushuaia, Argentina. Se espera que autoridades chilenas ratifiquen lo indicado por el mandatario brasileño.
Desde la tarde del lunes se despliega un amplio operativo de búsqueda en la zona del Paso Drake, con apoyo internacional por agua y aire, además de rastreos satelitales.
Son 35 efectivos militares y tres civiles quienes viajaban a labores de mantención, desde Punta Arenas hacia la Base Antártica Eduardo Frei Montalva. 64 familiares llegaron hasta la capital de Magallanes para estar al tanto de los avances en la búsqueda.
El Hércules C-130 fue declarado como “siniestrado” al cumplirse el tiempo de vuelo correspondiente a su carga de combustible, lo que ocurrió a eso de las 00:40 de la madrugada de ayer martes.
La Fuerza Aérea informó que la zona de búsqueda de la aeronave contempla seis cuadrantes, que en total cubren un área de 700 por 250 kilómetros, la cual se establece de acuerdo a las aeronaves que están participando y la geografía de la zona.
