Opinión

Desafíos universitarios frente a la Covid-19

Deseo enfatizar un aporte del que poco se habla: las Universidades están entre las primeras instituciones del país en implementar la modalidad de teletrabajo y docencia a distancia.

Por: Diario Concepción 17 de Mayo 2020
Fotografía: Diario Concepción

Mauricio Cataldo Monsalves
Rector de la Universidad del Bío Bío

Hace un siglo, una pandemia de influenza, la famosa gripe española, azotó a buena parte del mundo. Este virus del subtipo H1N1, habría tenido su origen en Kansas, EE.UU. y se expandió al mundo entero, matando, según las estimaciones de la época, entre 50 y 100 millones de personas. Fue el último gran evento de esta naturaleza, que afectó a la humanidad, la cual aún no se recuperaba de los efectos traumáticos de la Primera Guerra Mundial, la que sólo eclipsa, en su horror, a esta pandemia que sabemos provocó más muertes que dicho conflicto mundial.

Parecía ser que la enfermedad y la muerte masiva eran parte de un pasado remoto. Nuestra vida aséptica y de ilusión de seguridad, inmunizó nuestras perspectivas sobre la existencia del ser humano. Esta historia lejana y olvidada llegó a Chile en marzo de 2020, esta vez en forma de Covid-19, sembrando incertidumbre y recordando a la especie humana la necesidad de cuidarnos mutuamente, dado que somos todos iguales ante la amenaza de un virus que no discrimina.

Ante el desafío científico y humanitario que nos impone la pandemia, nuestras universidades han jugado un activo rol. Así, hemos puesto a disposición del país nuestro conocimiento, apoyando con el análisis de muestras para la detección del Sars-CoV-2, implementando prototipos de ventiladores mecánicos, desarrollando máscaras de protección, elaborando modelos matemáticos para predecir la propagación de la Covid-19, entre otras interesantes iniciativas.

Además de lo anterior, deseo enfatizar un aporte del que poco se habla: las Universidades están entre las primeras instituciones del país en implementar la modalidad de teletrabajo y docencia a distancia. En este escenario, todos los miembros de nuestras comunidades universitarias -estudiantes, académicos y administrativos- comenzamos a realizar nuestras actividades desde la seguridad de nuestros hogares. Esta medida fue una acertada decisión que ha contribuido a mitigar la propagación del virus en la población. Y ¿por qué? Pues, en las Universidades cohabitamos miles de personas, y nuestras moradas están repartidas por todas las comunas de nuestras ciudades, y con sólo una persona portadora del virus al interior de una Universidad, habríamos sido fuentes de contagio en casi todas las ciudades del país. Para dimensionar nuestra contribución, basta con considerar que el primer contagiado del coronavirus a nivel mundial, el paciente cero, ha generado toda la contingencia sanitaria que vivimos actualmente.

Lo anterior da cuenta de la forma en que las universidades están conectadas con la sociedad y la contingencia.

Etiquetas