La base de las selecciones y los talentos individuales están detectados, debido a la continua y masiva participación representando al Bío Bío. Hay un trabajo interesante por hacer, y a eso debemos enfocarnos durante este 2019.
Rodrigo Ramírez
Seremi del Deporte de Ñuble
Crear una nueva región ha sido un desafío tremendo, en todos los ámbitos, incluyendo al deporte. Si bien la base de las selecciones y los talentos individuales están detectados de antes, debido a la continua y masiva participación representando al Bío Bío, hay un trabajo interesante por hacer, y a eso nos debemos enfocar este 2019.
Ya pasaron los diagnósticos y las primeras acciones, y en pocos meses se vendrán los primeros desafíos de representación de nuestra región, como lo serán los Juegos Deportivos Nacionales, Finales Nacionales Escolares, y Juegos de la Araucanía.
En los deportes individuales el trazado está definido, ya que hay talentos claramente identificados, tanto en el atletismo, como en el tenis de mesa, el ciclismo y los deportes de contacto. El trabajo más delicado que se nos viene son las disciplinas colectivas, donde hay que contratar a los técnicos que consideremos adecuados para iniciar el proceso.
Pero hay otro tema en lo que debemos ser conscientes: los representativos son de la Región de Ñuble, por lo que debemos llegar con nuestro proceso selectivo a la mayor cantidad de comunas posibles, para que realmente los mejores tengan el derecho de llevar la camiseta de este nuevo equipo. Y mediante la competencia escolar, y el programa “Crecer en Movimiento”, debemos preocuparnos de formar buenos deportistas y mejores personas, y que ojalá cada niño conozca varios deportes, para que pueda escoger el que les acomode más, y para el cual presenten mayores aptitudes.
La única forma de crecer bien es hablar el mismo idioma y entendernos. Cuando empezamos con metas distintas, es cuando los avances se frenan, y entendiendo eso, el futuro que nos espera es brillante.