Opinión

Nativos digitales

Por: Procopio 19 de Abril 2018

Para nadie es un misterio que, ya bien avanzado el siglo XXI, marcado por la revolución de la era digital, la comunicación global, las redes sociales y la hiperconectividad, los paradigmas del conocimiento y el aprendizaje han experimentado un proceso de demolición y refundación.

La forma con que nos enseñaron a pensar, la lógica cartesiana, nos dice: cuando no entiendan algo, divídanlo en unidades y analícenlo por separado. Eso hoy lleva inevitablemente al error.

Lo que se requiere en estos tiempos cambiantes y de rápida obsolescencia tecnológica es operar con una lógica de síntesis, tomar distancia y no perder de vista el problema en su conjunto, una cualidad que ya se vislumbra como fundamental tanto para estudiantes, como para investigadores, emprendedores ejecutivos y tomadores de decisiones.

Superado el paradigma del computador como cerebro y reemplazado por la inteligencia de una red interconectada, la información está afuera, en otro lado, y hay que saber cómo salir a buscarla en un mundo altamente complejo.

Por eso es que la educación continúa un tanto descolocada, con una discusión más centrada en los contenidos que en la administración del conocimiento. ¿Quién es inteligente hoy? La inteligencia no está en el cerebro, sino en la mente, y la mente está afuera del ser humano: está en cómo nos relacionamos e interactuamos con el mundo que nos rodea.

En eso, tal vez es importante poner foco no tanto en los vacíos y déficits que los “viejos” notamos en las nuevas generaciones de estudiantes, sino en cuáles son las competencias que han ido desarrollando como primeras generaciones de nativos digitales.

En efecto, estos chicos parecen estar aprendiendo más por la sociedad en que están inmersos que por sus colegios, pues fueron los primeros que aprendieron a acoplarse a la revolución inalámbrica.

PIGMALIÓN

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