Opinión

¿Rumbo?

Por: Diario Concepción 09 de Diciembre 2017

Por Jorge Porter Taschkewitz

Capitalismo y Socialismo se enfrentaron en la denominada guerra fría. El año 1989, al caer los socialismos reales se desmoronó su sistema filosófico, político, económico y social.

Los dos sistemas proponían e implementaban aspectos distintos como: economía libre versus economía planificada centralizadamente; libertad de partidos políticos versus partido único; libertad de religión versus la religión es el opio del pueblo; libertad de expresión versus censura centralizada; propiedad privada versus propiedad estatal; elecciones libres versus elecciones dirigidas; libertad de acción versus control rígido del Estado; libertad de medios de comunicación versus único medio de comunicación.

Quienes se quedaron sin sistema tratan de atraer votos siguiendo lo que pide la calle. Intercambian mails o WhatsApp para concertar términos y difundirlos profusamente como lucro, gratuidad, inclusivos u otros términos.

Quieren una nueva constitución pero nunca indican los conceptos que cambiarían. Se refugian en que esta Constitución tiene un origen espurio, aun cuando el Presidente Lagos dijo a l firmar los últimos cambios: “este es un día muy grande para Chile, tenemos razones para celebrar. Tenemos hoy, por fin, una Constitución democrática”.

Confunden a la ciudadanía con eslóganes vendedores al ofrecer beneficios difíciles de rechazar, sabiendo que los recursos de Chile no lo permiten hoy día y sólo se puede financiar una parte, ya que también se debe atender otras necesidades urgentes de la población, como la pobreza.

Otros arremeten contra las AFP, diciendo que los promedios de pensiones del s istema de reparto son superiores a las p ensiones de las AFP, lo que es cierto pero nadie dice que el cálculo es engañoso, nadie explica que el sistema de reparto en Chile estaba quebrado, tampoco se explica que muchos chilenos no alcanzaban a juntar una cierta densidad de cotizaciones y se quedaban fuera del pago de pensiones pero sus pesos sí quedaban en el sistema porque había sido pagado por el empleador o sea más recursos con menos cotizantes; que había muchas cajas de previsión cada una con sus normas y convertidas en verdaderos grupos de poder; que los políticos cada vez intervenían más en esos grupos de poder; que los porcentajes de las cotizaciones eran más altos en el sistema antiguo, temas sin difusión.

Además, el Banco Central acaba de emitir un informe de la contribución macroeconómica favorable al sistema de capitalización individual versus el sistema de reparto.

El sistema de capitalización individual se debe mejorar en profundidad, no se actualizó el hecho que vivimos más, no se ha elevado la productividad que lleva a sueldos más altos y se debe incorporar más la solidaridad para aquellos que quedan en el camino, entre otros aspectos. Hay estudios con propuestas serias que debe considerar el próximo Presidente para mejorar las actuales y las futuras pensiones.

 

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