Opinión

Oportunidad

Por: Diario Concepción 25 de Noviembre 2017
Fotografía: Diario Concepción

Por: Jorge Porter Taschkewitz

Como chilenos, tenemos la oportunidad de unirnos para enfrentar el incierto y complejo futuro que proyectan los que entienden. Ya no se habla de un futuro de una proyección lineal y relativamente predecible como ha sido hasta ahora.

Hoy, están vivos más científicos y emprendedores que todos los que han existido durante la edad conocida de la humanidad. Ellos investigan, diseñan y elaboran productos y servicios que asombran y asombrarán a todos. No alcanzamos a conocer todo lo que se realiza en estos días, y nuestros soportes para esto, como los medios de comunicación y la educación, parecen estar mirando hacia el pasado más que el futuro, o a temas intrascendentes más que a los temas importantes.

Para el mundo del futuro debemos ser educados, simples, ágiles y rápidos. Desde niños, debemos tener pasión por lo que hacemos o queremos hacer, tener curiosidad manifestada en buenas preguntas y trabajar duro y perseverantemente.

Alguien dijo que la educación actual se realiza en salas del siglo 19, con profesores del siglo 20 para educandos y profesionales del siglo 21. Un desastre que se debe mejorar, desafortunadamente en Chile no se ve cómo se mejora con reformas como la desmunicipalización que en algunas regiones partiría el 2022 con demoras de varios años de implementación.

La burocracia y las ideologías obsoletas nos siguen ganando. ¿Qué se está haciendo hoy día en las salas de clase para mejorar la calidad de toda la educación?
Además, muchos chilenos deberán capacitarse en nuevas habilidades y conocimientos para obtener trabajos modernos, y dejando los trabajos que se llevará la Revolución digital 4.0. Quienes ya no estén en edad de hacer estos drásticos cambios debemos acogerlos en una red de protección social de excelencia.

Para ese futuro debemos prepararnos, nada sacamos con aferrarnos a trabajos que están destinados a ser reemplazados, destruidos o cambiados porque el tiempo y la tecnología lo hace inexorablemente.

Debemos modernizar, optimizar y automatizar los procesos de productos y servicios que provee el Estado, aprovechando la tecnología que nos permita obtener grandes ahorros, y esos excedentes destinarlos a mejorar la calidad de vida de los chilenos .

Terminemos con los pésimos servicios que el Estado está proveyendo hoy a pobres, niños, ancianos y pensionados.

No inventemos de nuevo la rueda o el fuego como andan promoviendo muchos agoreros por ahí, con soluciones mágicas para 100 años y que no existen.

Conocimiento, trabajo y perseverancia son la clave para sacar un país adelante. La desconfianza, mal trato, lenguaje descalificador y la violencia no son el camino, eso ya lo vivimos

Tenemos recursos, podemos generar más recursos al acabar con la burocracia para destinarlos al desarrollo de las regiones no RM que es la única forma de ser un país desarrollado y con niveles de desigualdad mínimos.

“Cuiden lo que tienen” nos han dicho presidentes de otros países. No sólo debemos cuidarlo sino mejorarlo y extender lo mejor a todas las familias chilenas.

Etiquetas