Opinión

La brújula y el norte

Por: Diario Concepción 01 de Septiembre 2016
Fotografía: imagenPrincipal-3317.jpg

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%%ARCANO_DIARIO: Diario Concepcion 
%%ARCANO_SECCION: Editorial 
%%ARCANO_FECHA: 01-SEP-2016 
%%ARCANO_EDICION: Conce 
%%ARCANO_PAGINA: 2 ===== Enfoque Texto ===== El anuncio del presidente ejecutivo de Codelco sobre el momento que vive la minera fue un choque frontal con la realidad. Con el precio del cobre por la nubes y la inercia de un país en desarrollo fueron muchos los que creyeron que el futuro estaba asegurado. De esta forma, el actual Gobierno comenzó a recoger demandas que involucraban el desembolso de grandes cantidades de recursos, con la idea de dejar contentos a los movimientos más organizados. El problema surgió cuando los números no calzaron, lo que sumado a reformas mal elaboradas, terminó dando paso al "realismo sin renuncia". Por su parte, los movimientos sociales le tomaron el pulso a un Gobierno que por más que intentó decir que no era de "billetera fácil", en los hechos demostraba todo lo contrario.

Ante tal escenario lo lógico sería priorizar los recursos, reconociendo la inviabilidad de emprender reformas que el Estado no es capaz de financiar. Lamentablemente, vemos cómo el Gobierno persiste en creer que las principales necesidades del país son la educación superior gratuita o el aumento de parlamentarios, mientras nos enteramos que las familias en campamentos han aumentado en un 41%; que gran parte de las pensiones no alcanzan a cubrir las necesidades de los adultos mayores; o que las condiciones de los niños del Sename son absolutamente precarias, claro reflejo que entre tanta reforma –mal hecha– el Ejecutivo extravió la brújula de la sensatez.

El Gobierno se convenció de que Chile había alcanzado tal nivel de desarrollo que era posible construir un segundo piso, sin darse cuenta que los pilares aún estaban a medias, agotando los recursos en proyectos plausibles, pero que no se condicen con las verdaderas urgencias del país. 

¿Es lógico que se gasten los recursos de una reforma tributaria completa en educación gratuita, mientras los campamentos del país aumentan?, ¿en que pensó el Gobierno cuando comprometió $15 mil millones anuales para tener más parlamentarios, mientras aún se debate el verdadero número de niños muertos dentro del Sename? Hasta en la fila del supermercado los adultos mayores y los menores tienen preferencia. 

Ahora que la realidad le impactó de lleno al Gobierno —y a todo el país— es de esperar que las verdaderas prioridades se tomen los esfuerzos del Ejecutivo, comprendiendo que antes del acceso a gratuidad universal se debe asegurar el acceso a agua potable de miles de chilenos que, aunque parezca insólito, todavía no tienen este bien tan básico. Es necesario que el Gobierno vuelva a pensar sus prioridades, ya que no sólo se trata de una deuda política sino que moral con los que más lo necesitan. Sename, campamentos y pensiones: aquí, aquí y aquí está el norte.

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