Los padres han encontrado en los bolsos, la única solución para proteger a sus hijos de eventuales tiroteos.
Luego del tiroteo que afectó el 14 de febrero al instituto Parkland, en Florida, las empresas dedicadas al rubro de bolsos antibalas han visto incrementadas sus ganancias al mismo ritmo que se han multiplicado las manifestación para que el gobierno de Estados Unidos controle el uso de las armas.
Según detalló La Tercera, la empresa colombiana Miguel Caballero Compañy, que vende productos de esas características en 52 países y posee 25 años de trayectoria, ha aumentado sus ventas en un 400% después del tiroteo.
La empresa se estableció en 2017 en Miami y tiene dos líneas de producción: MC Armor, para adultos y MC Kids para niños y jóvenes estudiantes.
Justamente la última colección, surgió en 2014 tras la masacre en Colorado y para Carolina Ballesteros, creadora de la línea para niños y adolescentes, afirmó al mismo medio que “somos una empresa privada y no tenemos nada que decir en cuanto a leyes, mientras no se cambien muchas cosas, nosotros estamos dando la solución. Hablamos con escuelas y padres, que son los más interesados”.
Justamente son los padres los usuarios más frecuentes y los que los han impulsado no sólo a incrementar la cantidad de las mochilas sino, también, de la confección de otros elementos que pueden resultar de gran utilidad en caso de vivir una experiencia como las del instituto.
Un ejemplo de ello, es la creación de “tableros blindados que se puedan bajar y hacer la función de refugio para que los estudiantes se queden detrás o un maletín para los maestros que les cubre el torso en caso de tiroteo”, detalló Ballesteros.
El valor de los bolsos antibales está entre US$300 y 500 dólares, y son hasta el momento la única solución que han encontrado los padres para proteger a sus hijos de la violencia.