Un preocupante aumento de Influenza A hemos tenido en la Región del Biobío y en el país durante las últimas semanas. Una noticia que inquieta sobre todo debido a la época en que nos encontramos y a que se trata de un episodio que no se había visto desde 2022.
“El último informe de virus respiratorios de la semana epidemiológica 45 (del 9 de noviembre de 2025) da cuenta de una positividad del 50% a nivel nacional con un acumulado de casos de muestras totales positivas de 2 mil 32 muestras. Cuando miramos esas 2 mil 32 muestras el 36,9% corresponde a la Influenza A, son 812 muestras positivas”, indicó Jorge Vilches, jefe del Departamento de Epidemiología del Ministerio de Salud.
En esa línea, desde el Minsal confirmaron que existe apertura de la vacunación para prevenir esta enfermedad no sólo a los grupos de riesgos, sino que a toda la comunidad.
Hay que entender que los virus respiratorios se transmiten de persona a persona a través de gotitas que quedan o suspendidas en el aire o que se depositan en los distintos objetos que hay a nuestro alrededor”, recalcó el epidemiólogo. Por lo que es importante tener presente las medidas preventivas que están disponibles para poder enfrentar este brote de primavera, estableció.
De esta forma, la vacunación asume un lugar de relevancia en la prevención de la Influenza A, sobre todo, aseguran desde el Ministerio de Salud, porque en Biobío no han logrado coberturas óptimas en mayores de 60 años y niñas y niños de entre 6 meses y 5 años.
En el mismo contexto de prevenir, también hay medidas generales como el lavado de manos frecuente, el utilizar mascarilla en caso de que las personas tengan síntomas respiratorios, el cubrir la nariz y boca con el antebrazo o el codo al momento de toser o estornudar y no hacerlo con las manos.
Según la OMS, de acuerdo con lo publicado en el sitio web del Minsal, la tasa de ataque anual de la influenza a nivel mundial es del 5% a 10% en adultos, y del 20% a 30% en niños. La enfermedad es causa de hospitalización y muerte, sobre todo en los grupos de mayor riesgo. Estas epidemias anuales causan en todo el mundo unos 3 a 5 millones de casos de enfermedad grave y unas 250.000 a 500.000 muertes.
Por eso es relevante tomar medidas de prevención, aunque estemos en una temporada que no es habitual para este tipo de enfermedades respiratorias, la evidencia nos muestra que la situación es de cuidado, sobre todo para los grupos de riesgo.