La inauguración oficial del Puente Ferroviario, el cual abrió este martes y, de manera definitiva, una segunda vía para el tránsito de trenes, ha tenido un impacto regional y nacional debido a su belleza estructural y, obviamente, por su importancia estratégica.

“Hermosa postal del Río Bío Bío en la primera noche del Puente Ferroviario 100% habilitado, para facilitar el traslado de miles de trabajadores y estudiantes diariamente en el Gran Concepción. En minutos, vamos con el inicio de obras del tren Alameda-Melipilla que unirá a Estación Central, Cerrillos, Maipú, Padre Hurtado, Peñaflor, Talagante, El Monte y Melipilla. Con visión de Estado, avanzamos en conectividad en todo Chile”, publicó en sus redes sociales el Presidente, Gabriel Boric.

“Desde hoy, Chile cuenta con una nueva obra centenaria. El Puente Ferroviario sobre el Biobío ya está completamente operativo. Un proyecto de Estado que trasciende gobiernos y que se vuelve un símbolo de progreso. Un puente que se construyó íntegramente durante nuestro Gobierno”, declaró el ministro de Transportes, Juan Carlos Muñoz.

Son dos ejemplos que dan cuenta de la trascendencia de una estructura que, sin duda, pasa a la historia de la ingeniería de construcción en nuestro país, sustentado también por su importancia para el transporte público y de carga.

En ese sentido, respecto del transporte público, quienes vivimos en la Región sabemos de su relevancia en mejorar la calidad de vida para quienes residen en la zona sur del Biobío, quienes por años plantearon problemas en sus traslados hacía Concepción.

El Puente Ferroviario, junto al Puente Industrial, se presentan como una solución a lo que parecía un drama endémico de la zona y que no resistía más años de sufrimiento.

De acuerdo con las autoridades regionales se espera que, junto con la futura Ruta Pie de Monte, la cual esta en fase inicial con la apertura económica y la oficialización de una empresa interesada en el proyecto, se logren disminuir los tacos que, como señalamos, han sido un sello por décadas.

Por lo anterior, las nuevas y futuras obras de infraestructura vial apuestan por el desarrollo de nuestra región y el buen vivir de la ciudadanía. Hoy, incluso, podemos sentirnos orgulloso del aporte y belleza de un viaducto que nos entrega todo su esplendor.