
No tenemos que olvidar, incluso, que lo concretemos hoy, no solo es provechoso para nosotros, sino que también para mejorar la calidad de vida del futuro.
Si se trata de salud, sin duda, la presencia de áreas verdes en las ciudades es clave. De acuerdo con lo planteado en Diario Concepción, hace algunos días, por parte de municipios de la zona, solo Talcahuano declara cumplir con el estándar de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de sumar entre 9 y 12 metros cuadrados de áreas verdes por habitante. Mientras Concepción, San Pedro de la Paz y Hualpén no cumplirían. La Asociación Española de Parques y Jardines Públicos destaca que en un reciente estudios de la OMS se establece que “entre los beneficios de la infraestructura verde, este estudio destaca cuatro ámbitos: medioambientales, sociales, culturales y aquellos vinculados al bienestar y la salud, tanto física como mental. Aunque cada uno presenta resultados específicos, todos ellos están interrelacionados en la medida que la socialización que tiene lugar en los parques y jardines verdes contribuye al estado anímico de los ciudadanos”.
Ese mismo el informe de la OMS, según la Aepjp, aporta una serie de cuestiones científicas a las que deben darse respuesta en futuras investigaciones y destaca una serie de propuestas para extender los beneficios saludables de los parques y jardines entre la población. Por su parte, a nivel local, el profesor Luis Seminario Salas, integrante del programa PromoSalud UdeC, destacó que los efectos positivos se registran incluso tras breves exposiciones. “La práctica de actividad física en entornos naturales proporciona estímulos agradables que sirven de distracción y disminuyen emociones negativas. El impacto en el estado de ánimo y la autoestima se produce ya en los primeros cinco minutos de ejercicio al aire libre”, precisó Seminario.
Desde la Seremi de Salud del Biobío se explicó a Diario Concepción que se trabaja en las 33 comunas de la Región para lograr estándares internacionales. “Trabajamos en las 33 comunas del Biobío para mejorar plazas, parques o transformar sitios eriazos en lugares seguros y útiles para la comunidad. No se trata solo de plantar árboles, sino de crear entornos que favorezcan la vida en comunidad y el bienestar emocional”, añadieron desde la Seremi.
Con todos los antecedentes encima de la mesa, se agradece que las autoridades regionales y locales manifiesten preocupación respecto de esta materia. No tenemos que olvidar, incluso, que lo concretemos hoy, no solo es provechoso para nosotros, sino que también para mejorar la calidad de vida del futuro.