Una estrategia que a días del primer año en el Gobierno, parece ser una buena manera para aumentar la aprobación. Al final de cuentas: más regiones.
Seis visitas en prácticamente un mes. Esa es la cuenta sobre las veces en que el Presidente, Gabriel Boric, ha visitado la Región del Biobío desde que asumió el cargo en marzo del año pasado.
Una cuestión que se esperaba desde el inicio de su administración y que no se dio justamente hasta ahora, cuando el Biobío acaparó la atención del país en medio de los incendios forestales.
Reuniones con las autoridades de la zona, despliegue en zonas afectadas, recepción de grandes aviones especializados en este tipo de combate e incluso compromisos con bomberos y con la familia de la voluntaria mártir de esta tragedia, Yesenia Muñoz. Esos son hasta ahora los hitos de las llegadas del Presidente a la Región.
En las últimas horas fue el inicio del año escolar en la caleta Punta Lavapié de Arauco la razón para que Boric arribara, nuevamente, a esta zona.
En la oportunidad el mandatario manifestó que “las clases van a poder iniciarse aquí en Punta Lavapié y van a poder recibir los contenidos necesarios para no afectar su año escolar y eso es tremendamente importante porque, también, venimos saliendo de una pandemia que fue durísima en donde se generó una brecha en materia educativa que, como Gobierno, nos hemos puesto el desafío prioritario de cerrar esa brecha”.
“Por eso era tremendamente importante que las clases partieran en marzo y hoy día puedo decir con certeza que las clases en todas las comunas afectadas por el incendio van a haber partido durante la primera quincena de marzo”, agregó.
Más allá de que obviamente es necesario acelerar todas las medidas para garantizar las clases en las zonas afectadas, esto también va en línea con las siempre presentes encuestas.
Es que la última Cadem demuestra que la aprobación del Presidente llegó a un 35%, el mejor resultado desde septiembre del año pasado.
Algo que, por lo visto, viene a ser consecuencia de la imagen de despliegue territorial en regiones. Esta vez donde se están registrando los grandes problemas de forma sostenida y a tiempo real.
Parece que la ciudadanía pasa a segundo plano de importancia las declaraciones de cualquier tipo o el mal resultado de una negociación política, cuando ve al Ejecutivo en su conjunto, pero por sobre todo al Jefe de Estado, ahí en el lugar de los hechos. Una estrategia que a días del primer año en el Gobierno, parece ser una buena manera para aumentar la aprobación. Al final de cuentas: más regiones.