Se lamenta la pérdida de más de dos decenas de vidas y son miles las familias afectadas, cientos de casas destruidas y cosechas perdidas, que esperan de una mano estatal, rápida y eficiente.
No los dejaremos solos”. Ese ha sido el mensaje recurrente en su recorrido por las regiones afectadas del Presidente Gabriel Boric. Primero, fue en medio de un sobrevuelo por la comuna de Tomé, en que el Mandatario, a través de su cuenta en Instagram, lo dijo por primera vez.
Luego, en la Región de Ñuble, lo volvió a repetir, mientras lideraba la coordinación de los equipos de Gobierno en el territorio que alguna vez fue parte del Biobío.
Y, este domingo, mientras entregaba un mensaje de esperanza a la ciudadanía de Coronel, luego de entregar sus condolencias a los Bomberos y familiares por la mártir de la institución, lo volvió a reafirmar: “No los dejaremos solos”.
De alguna manera, con el despliegue de ministros y ministras por los suelos de las regiones con escenarios complejos, esa afirmación se ha hecho patente. Solo a nivel regional, han acudido a diversas comunas con alerta roja: la ministra de Salud, Ximena Aguilera, y el ministro de Obras Públicas, Juan Carlos García.
A lo que se suma también, el paso del subsecretario del Interior Manuel Monsalve y el despliegue de los seremis por diversas localidades, como encargados de agilizar la llegada de ayuda en la emergencia.
Sin embargo, han surgido reclamos de alcaldes que están en medio de la crisis. Dos casos ha sido los de la alcaldesa de Santa Juana, Ana Albornoz, y el alcalde de Yumbel, José Sáez, quienes han declarado sentirse solos frente a la adversidad del fuego. Antes, también plantearon quejas el alcalde de Ránquil, Nicolás Torres, y la alcaldesa de Tomé, Ivonne Rivas.
Lo anterior, en la desesperación al ver cómo los incendios consumían las viviendas de sus vecinos.
Volviendo a la frase “No los dejaremos solos”, del Mandatario en sus viajes a la zona, es de esperar que, dada la magnitud de la tragedia, no se quede solo plasmada en un mensaje.
Se lamenta la pérdida de más de dos decenas de vidas y son miles las familias afectadas, cientos de casas destruidas y cosechas perdidas, que esperan de una mano estatal rápida y eficiente. Ojalá que no los dejemos solos y la frase del Presidente Boric sea también un aliciente para la solidaridad que hemos visto estos días.
Los afectados lo necesitan, al Gobierno, las empresas y a Chile entero.