Volvemos a ver otra vez ese paradigma que se posiciona cada vez con más fuerza: el de la mujer siendo protagonista en cualquier espacio de nuestra sociedad.
La actividad agrícola comienza a entrar en un estado de mayor normalidad, en comparación a los últimos años en la Región del Biobío. Si hasta noviembre del año pasado, prácticamente al inicio de la actual temporada, había temor por no llegar a la cobertura de las plazas de trabajo necesaria para la producción, hoy los datos muestran un escenario totalmente distinto.
De acuerdo a información de Gobierno, durante estos días, son cerca de 10 mil personas quienes están desarrollando la labor en los campos de la Región.
Pero dentro de esta buena noticia sobre la estabilidad, hay un porcentaje clave: cerca del 90% de estos cupos de trabajo están siendo ocupados por mujeres.
“Hay que considerar que del total de los puestos laborales generados para la presente temporada en el sector agrícola, efectivamente casi un 90% corresponde a mujeres, lo que es una alta participación”, dijo la seremi del Trabajo y Previsión Social, Sandra Quintana.
“Tras reunirnos con el sector agrícola de Los Ángeles, a comienzos de la presente temporada, como parte de una fiscalización programada orientada a la Seguridad Laboral, nos dijeron que los cupos estaban prácticamente llenos y contaban con una cantidad suficiente de mano de obra, tanto para packing como para la recolección”, agregó la seremi.
Otro actor importante, de acuerdo a las fuentes del sector, ha sido la población migrante. De hecho, basta recordar que ya en 2018 en la Provincia de Biobío esto comenzó a ser una tónica.
Común llegó a ser en un momento ver buses de servicios especiales, saliendo desde la Plaza Pinto de Los Ángeles, con personal extranjero hacia las cosechas cercanas.
Un asunto que demuestra lo importante que es la participación de las mujeres y los migrantes para el desarrollo de la actividad de cosecha y empaque. Uno que se vio dañado en medio de las cuarentenas, y que luego como consecuencia en contra de mediano y largo plazo, vio una carencia en el personal a disposición luego de las necesarias entregas de ayudas estatales.
Si resumimos, entonces, que 9 de cada 10 vacantes agrícolas corresponden a mujeres, volvemos a ver otra vez ese paradigma que se posiciona cada vez con más fuerza: el de la mujer siendo protagonista en cualquier espacio de nuestra sociedad.