Resulta clave el trabajo en conjunto de los sectores público y privado, sobre todo cuando estas semanas han estado marcadas por el problema de conectividad que significa el Puente Ferroviario.
Las exportaciones siguen siendo una actividad importante en el desarrollo de la Región del Biobío. Junto con ser una fuente de ingreso, esto también se traduce en una vitrina de exposición con el resto del mundo.
En este sentido es que Estados Unidos y China son los mercados de mayor importancia, siendo el primero el que más contacto genera con nuestra zona.
Ahora, cuando se conoce que el país asiático pasa por un anormal escenario, donde su economía creció solo un 3% en 2022, uno de los niveles más bajos en los últimos 40 años, es que el Biobío puede decir que sigue a pie firme. Pese a todo lo ocurrido en los últimos años, la baja y crecimiento de los ocupados, la inflación vigente, etc., y donde de acuerdo al Informe Económico Regional (IER) de la Universidad de Concepción, esta zona del país no se verá tan afectada por la recesión prevista para 2023.
Siguiendo con el efecto chino, el mismo estudio establece que sostiene que la mayor parte de las exportaciones nacionales van a China, por lo tanto, Chile vuelve a depender de este mercado. En tanto, la mayor parte de los envíos de la Región del Biobío van a Estados Unidos, que hoy presenta síntomas de bastante mayor estabilidad económica que el gigante asiático, cuyas cifras siguen siendo un misterio debido a las recientes noticias de recrudecimiento de los efectos de la crisis sanitaria.
“La Región le vende y le exporta productos principalmente a Estados Unidos y que considera más de un tercio de las exportaciones regionales, mientras que China solo participa con un 10% de las exportaciones. Por lo tanto, considerando el impacto que puede generar lo que está ocurriendo en China el impacto va a ser muy poco significativo”, dijo Javier Sepúlveda, seremi de Economía, Fomento y Turismo del Biobío.
Esto es otra muestra que si bien queda mucho por superar, hay varias luces concretas que exponen un mejor momento de la actividad productiva regional, lo que no quiere decir que no se deba estar preparado para eventualidades ligadas al momento económico nacional.
Por eso es que resulta clave el trabajo en conjunto de los sectores público y privado, sobre todo cuando estas semanas han estado marcadas por el problema de conectividad que significa el Puente Ferroviario y que repercute en otro tipo de terminales, accesos y salidas a nuestra Región.