Se trata de comunidades cuyas administraciones solicitaron la revisión de las instalaciones, y que tienen la obligación de realizar un chequeo cada dos años.
“En lo que va de este año 2023, se alcanzó un número de 753 edificios con inspección periódica realizada, de los cuales 668 (88,7%) ya tienen Sello Verde aprobado” afirmó Manuel Cartagena, director regional de la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) del Biobío.
Cartagena explicó que “hay que aclarar que son los propietarios de los inmuebles los responsables de mantener sus instalaciones, tanto eléctricas como de gas, en buen estado. En el caso del gas, tanto los edificios residenciales como los locales comerciales, los restaurantes y los establecimientos educacionales tienen la obligación de contar con su Sello Verde aprobado, responsabilidad que está dada por ley hacia los propietarios y sostenedores de establecimientos”.
“Para reforzar esta situación, como SEC desarrollamos una labor fiscalizadora monitoreando aquellas instalaciones que pudieran estar expuestas a un mayor riesgo. En esa lógica, oficiamos a los propietarios para que cumplan con su responsabilidad”, detalló.
El director regional de la SEC contó además que “el costo (de las certificaciones) es algo que depende del prestador del servicio. Las personas que deseen solicitar la inspección periódica de sus instalaciones deben contactarse con un Organismo de Certificación Externo, certificado por la SEC, y éste entregará el distintivo correspondiente según el estado de sus instalaciones”.
“Para este efecto, en www.sec.cl/sello-verde-ok/ las personas pueden llevar a cabo este proceso, sitio donde se facilita la recepción de la oferta técnica y económica de las Entidades de Certificación que prestan el servicio”.
Según se muestra en el sitio web de la Superintendencia, en la Región del Biobío solo existen tres empresas registradas como certificadoras, pero de acuerdo a lo indicado por Daniela Espinoza, seremi de Energía, además existen técnicos debidamente autorizados.
La jefa de la cartera de Energía de Biobío comentó que “el organismo que fiscaliza los sellos es la SEC y nosotros como ministerio promovemos la obtención del Sello Verde y la importancia que tiene mantenerlo aprobado y siendo verificado periódicamente de acuerdo a la normativas vigentes y cada dos años como los establece la ley para el caso de edificios con comunidades”.
Consultada por la Agenda de Seguridad del Gas que partió el año pasado, la seremi de Energía confirmó que ha seguido operando este año en coordinación con distintas entidades entre las que está la SEC.
En cuanto al chequeo de las instalaciones, Daniela Espinoza aclaró que “la revisión periódica es voluntaria en edificaciones no colectivas, es decir, las casas, mientras que en comunidades de edificios es obligatoria(…) una cosa son las entidades autorizadas de certificación y otra son los profesionales técnicos que tienen las licencias para poder intervenir o hacer las mejoras que requieren las instalaciones en edificios y viviendas”.
Manuel Cartagena describió también cómo es la actual clasificación de los sellos. “El Sello Verde certifica que las instalaciones de gas son seguras; el Sello Amarillo, que éstas presentan deficiencias que deben ser reparadas en el corto plazo y el Sello Rojo, da cuenta de instalaciones con deficiencias serias y que representan un potencial peligro. En el caso de obtener el Sello Amarillo o Rojo, la reparación necesaria en las redes debe ser gestionada por el propietario de la instalación o la administración del edificio, cuando corresponde a una comunidad, y ejecutada por un instalador autorizado por la SEC. Además, es importante recalcar que, una vez que se obtiene el Sello Verde aprobado, éste debe renovarse cada dos años, solicitando una nueva revisión de las condiciones de seguridad de las instalaciones interiores de gas, obligación que, como ya mencionamos, corresponde a los propietarios”.
Leonel Valenzuela es administrador del condominio Parque Collao, ubicado en la avenida del mismo nombre a la altura del #951, en Concepción. Cuenta con 120 departamentos.
Tras ser uno de los recintos inspeccionados como parte de la Agenda de Seguridad del Gas en octubre del año pasado, comentó respecto al costo que conlleva contar con la certificación del Sello Verde aprobado, que “por cada unidad, las empresas están cobrando aproximadamente entre 0,8 a 1 UF ($34.480) valor que por lo general es regulado por el mercado”.
