Según el dirigente el comercio informal, los rayados, entre otros, juegan en contra de la actividad, la que debe mejorar su competitividad en el ámbito internacional. La violencia en la Provincia de Arauco también es factor.
Los escenarios más críticos de la pandemia y con ello las políticas públicas restrictivas más importantes han ido retrocediendo. Un escenario favorable para uno de los sectores más golpeados por el efecto Covid-19: el turismo.
Si bien existe este retorno paulatino en cuánto demanda, desplazamientos, pernoctaciones, etc, de acuerdo al gremio los números todavía no se estabilizan totalmente en comparación a lo que ocurría antes del comienzo de la crisis sanitaria, en la Región del Biobío.
Así lo explica Jaime Guazzini, presidente de la Federación de Empresas de Turismo (Fedetur), en entrevista con Diario Concepción.
Guazzini, quien además es gerente general de Gran Patagonia, empresa tour operadora especialista en el austral destino de mismo nombre (Patagonia), y director de la Cámara de Turismo de Coyhaique, realiza un balance 2022 sobre la actividad en Biobío. Además, analiza la recién estrenada Estrategia Nacional de Turismo que impulsa el Gobierno.
-¿Cuál es su balance de la actividad turística de Biobío en 2022?
-Biobío, en 2022 registra una caída promedio mensual de 30% respecto al 2019, en la llegada de turistas a establecimientos de alojamiento turístico (hotel, hostales, cabañas, entre otros). El total acumulado de enero a octubre de 2022 es de 348 mil llegadas de turistas a Establecimientos de Alojamientos Turísticos, lo que significa una caída del 31,6% comparado con el mismo período del 2019. En el caso de turismo interno, se estima que el 2021 se realizaron cerca de 3,6 millones de viajes a la Región, de los cuales 1,2 millones ocurren en temporada alta de diciembre a marzo. Los principales orígenes son: 45% de viajes intraregionales, 20% de la Región Metropolitana, 10% de Ñuble y un 8% de Araucanía.
– ¿Cuáles considera son las cifras actuales más relevantes del sector turismo en Biobío?
– En la actual etapa de recuperación del turismo, sin duda que las cifras de turismo interno son hoy las más relevantes, especialmente para esta temporada alta de verano, ya que la mayor demanda vendrá del flujo interno de visitantes, aún cuando el turismo receptivo y de cruceros también se está recuperando.
– ¿Según usted cuáles son las principales ventajas, desventajas y desafíos de la recién estrenada Estrategia Nacional de Turismo 2022-2025?
– El principal desafío que nos hemos planteado como sector es lograr que el turismo sea considerado una política de Estado, de manera que toda la institucionalidad esté alineada y comprometida a consolidar esta actividad mediante políticas públicas sostenibles y de largo plazo.
Otro desafío que tenemos es recuperar la competitividad de Chile como destino turístico, donde perdimos mucho terreno durante la pandemia, ya que fuimos de los últimos países en eliminar las restricciones sanitarias. Aquí será clave la promoción internacional y el marketing que despleguemos para mostrar al mundo los atributos y atractivos del país y del Biobío.
En materia de infraestructura turística y conectividad hay mucho que hacer también, ya que tanto la Región como el país deben ser capaces de ofrecer instalaciones turísticas de calidad y una buena conectividad entre destinos que faciliten la llegada de visitantes. En esto resulta importante recuperar rutas y frecuencias de vuelo que se perdieron durante la pandemia.
– ¿Qué aspectos de la Estrategia Nacional de Turismo debería ser de especial relevancia para la Región del Biobío?
– Uno es la seguridad, sin duda, ya que en la Región hay focos de violencia instalados, como en la Provincia de Arauco y en zonas como el Lago Lanalhue, que afectan al turismo, porque esta es una actividad donde las personas quieren vivir buenas experiencias.
La transformación digital es otro elemento importante al momento de recuperar competitividad en materia turística para acercar la Región como destino a las personas y también ampliar la oferta turísticas para los distintos gustos y bolsillos.
Biobío tiene destinos costeros muy atractivos, donde la gastronomía tiene un papel relevante para atraer turistas y que debe seguir potenciando.
– ¿Cómo puede afectar el empleo en Biobío la nueva Estrategia Nacional de Turismo?
– En la medida que logremos que el turismo se transforme en una política de Estado y la actividad crezca y se desarrolle, obviamente que eso implicará generar más fuentes de empleo formales y de calidad. Hoy aportamos cerca de 650 mil empleos directos y el objetivo es, en un plazo razonable, llegar a un millón. Si eso se concreta, la Región también se verá beneficiada con una mayor oferta laboral en esta área.
-¿Cómo proyecta se comportará el empleo en el sector turismo en Biobío para 2023?
-El 2023 será un año difícil en términos económicos y así lo están reflejando las cifras del Imacec, donde especialistas ya hablan de una recesión técnica.
En materia de empleo, eso tendrá una repercusión que ya se está notando ante el incremento de la informalidad laboral.
En la medida que nos podamos seguir recuperando como sector, podremos apoyar a que ese escenario económico no impacte tanto el desempleo y esperamos que así sea.
– ¿Cuáles deberían ser las prioridades de inversión pública y privada en Biobío para 2023?
– En Chile, en general, y también en Biobío, ha habido en los últimos años un deterioro importante de los espacios públicos que tenemos que recuperar, ya que eso hace que se vayan perdiendo zonas que son atractivos turísticos, como es el caso de determinados centros urbanos o ciertos polos gastronómicos donde el comercio informal, los rayados y la inseguridad van afectando la actividad turística.
Un punto importante para la el Biobío es seguir avanzando en el mejoramiento de los bordes costeros, para disponer de una oferta turística y gastronómica de buena calidad, al igual que la conectividad intrarregional, para unir de forma segura y expedita las distintas zonas turísticas del Biobío, así como mejorar de forma constante la infraestructura para recibir cruceros.
– ¿Cuáles son sus proyecciones más relevantes para el desarrollo turístico en Biobío y el país para 2023?
– Nuestra primera proyección para el total anual de 2023 es de 4,2 millones de llegadas (de turistas). Para la Región, también el 2023 debiese marcar un recuperación similar a la de 2019, antes de la llegada de la pandemia, en términos de visitantes, donde el turismo interno seguirá teniendo una incidencia importante.
La recuperación del turismo receptivo será lenta, sobre todo considerando que los países vecinos abrieron sus fronteras antes que Chile, por lo que un gran número de turistas que pensaban venir al país tomaron la decisión de viajar hacia otros destinos.
Chile perdió competitividad por restricciones en las condiciones de entrada que impuso para turistas extranjeros. Estimamos que Chile podría alcanzar cifras de llegadas de turistas extranjeros similares a las de prepandemia en el mes de septiembre de 2023.