Ajuste sería un efecto esperado tras medidas implementadas. Hubo mayor producción de servicios y hay esperanza de una estabilización de los precios.
De acuerdo a lo informado preliminarmente por el Banco Central, el Imacec de agosto de 2022 no presentó variación en comparación con igual mes del año anterior. La serie desestacionalizada aumentó 0,6% respecto del mes precedente y no exhibió variación en doce meses.
El resultado del Imacec se explicó, según el ente rector, por el crecimiento de las actividades de servicios, compensado por las caídas de la minería y el comercio. Por su parte, el crecimiento del Imacec en términos desestacionalizados fue determinado por el desempeño de los servicios, en particular de educación.
En cuanto al Imacec no minero, el instituto emisor señaló que presentó un crecimiento de 1,3% en doce meses, mientras que en términos desestacionalizados, lo hizo en 0,7% respecto del mes anterior.
Javier Sepúlveda, seremi de Economía en Biobío expresó que el nulo avance que tuvo el Imacec de Agosto de 2022 en comparación con el mismo mes del año agosto de 2021, “son una evidencia clara del proceso de ajuste de la economía en el tránsito de un estancamiento y control de la inflación”.
El seremi recordó además que todo proceso de control de la inflación lleva como consecuencia y de la mano un proceso de desaceleración económica en donde la actividad productiva en la actividad económica se ve levemente estancada, esto de forma transitoria, para posteriormente dirigirse a un ciclo expansivo de la economía, “lo que esperamos que ocurra durante el primer trimestre del próximo año”.
Para Claudio Parés, doctor en Economía de la Universidad de Toulouse y académico de la Universidad de Concepción, las cifras dan señales de que “con el alza en la TPM (Tasa de Política Monetaria) y el ajuste fiscal ha ocurrido lo esperado: una reducción en el ritmo de crecimiento y nos queda la esperanza de que, en el mediano plazo, comience a estabilizarse el nivel de precios”.
El economista sostuvo además que “dijimos desde un principio, la crisis derivada del Covid-19 no era una crisis de demanda, sino de oferta, pero, en lugar de apuntar a un ajuste de nuestra forma de producir, utilizamos la artillería de demanda, usando los ahorros de las AFP, junto con bonos de gasto fiscal agresivos. Esto fue un alivio en su momento, pero sabíamos que tendría consecuencias y las estamos pagando ahora: una espiral inflacionaria que todavía no podemos detener y un ajuste de la producción por la fuerza”.
De acuerdo con secretario regional ministerial en Biobío, en el sector servicios de agosto, tanto en el ámbito país como en la Región hubo un aumento en la producción de servicios que se evidenció claramente.
A su vez, Javier Sepúlveda detalló que “existe un aumento de las actividades artísticas, entretenimiento y recreativas en un 33%, también un aumento en ventas de transportes y almacenamiento que crecieron un 30%, en el caso de ventas de actividades de alojamiento y servicios de comida un 22% y de las ventas de las actividades inmobiliarias un 19%. Por su parte, las ventas de servicios administrativos y de apoyo crecieron 14% y de las ventas las actividades científicas y técnicas un 13%, por último también las ventas de las actividades de información y comunicaciones un 1,3%.”
En turismo, Biobío creció un 42,4% las pernoctaciones y aumentó en el acumulado de 12 meses un 72,6%.
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