Existe un gran número de trastornos musculoesqueléticos asociados a malas posturas, largas jornadas laborales y falta de actividad física.
Como todos sabemos, en época de pandemia el teletrabajo ha sido muy necesario y, al parecer, llegó para quedarse. Por eso, cada vez se ha ido estudiando más sobre el tema y, tal como se ha visto a nivel médico, se ha evidenciado que existe una elevada prevalencia de trastornos musculoesqueléticos que tienen relación con factores como posturas inadecuadas, muchas horas de trabajo y sedentarismo. Ante esto, Sebastián Hernández, kinesiólogo de Bupa Sport, parte de IntegraMédica entrega sus consejos para evitar que aparezcan este tipo de lesiones.
“Se trata de trastornos asociados principalmente a la columna dorso-lumbar y cuello, y secundariamente, a los hombros, muñecas y codos. Existen diferentes causas probables, pero principalmente se pueden deber al cambio de hábitos, tanto de posturas mantenidas, un mal puesto de trabajo, por la disminución de actividad física, o ahora, por la mejora en el número de contagios, a la vuelta a la actividades y deportes después de mucha pausa”, explica Sebastián.
Teniendo en cuenta que, si bien no existe la postura ideal, el especialista señala que podemos intentar evitar la sobrecarga de algunas estructuras, principalmente musculares, con algunas ayudas en el puesto de trabajo. Por ejemplo: procurar una adecuada relación de la altura de silla con la altura de escritorio/mesa; tratar que la pantalla quede 10° a 20° bajo la altura de los ojos; tener los antebrazos apoyados y con un ángulo cercano a los 90°; utilizar idealmente un teclado y/o pantalla aparte, ya que trabajar con notebook nos limita a realizar todo en “miniatura”; mantener la espalda apoyada en silla cómoda. Para esto se puede utilizar un cojín en la zona lumbar dependiendo de la comodidad de la persona.
Además de lo anterior, sugiere ver que las caderas queden sobre las rodillas; posicionar los pies ligeramente en dorsiflexión, apoyados en una superficie; realizar pausas activas cada 60 minutos, sobre todo en trabajos en los que se debe mantener una misma posición. Para esto, se pueden hacer ejercicios de movilidad articular y estiramiento, desde la zona del cuello, hombros, columna lumbar y extremidades inferiores.
“Lo importante es que si una persona siente dolor, adormecimiento, pérdida de fuerza o que tiene dificultades para retomar la actividad física y quiere asesorarse por profesionales para volver de la mejor forma, es clave que consulte para tener una evaluación oportuna y mejorar su rendimiento, agrega el kinesiólogo Sebastián Hernández.