De acuerdo con un levantamiento realizado por la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS), un 38% de los trabajadores considera que no cuenta con los equipos y mobiliario necesario para realizar sus labores cómodamente
Para que un puesto de trabajo sea cómodo, seguro, confortable y productivo, es necesario que las organizaciones dispongan de los elementos adecuados, más ahora en que muchos han tenido que adaptar sus espacios en el hogar para trabajar. Sin embargo, de acuerdo con un levantamiento realizado por la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS) actualmente un 38% de los trabajadores consultados considera que no cuenta con los equipos y mobiliario necesario para realizar sus labores cómodamente.
A esto se suman los efectos que produce el teletrabajo en la salud mental de los chilenos: más del 30% de los colaboradores que respondieron a la consulta de la ACHS dice que no necesariamente dispone de un periodo diario de desconexión asegurado de al menos 12 horas continuas; tampoco ha sido informado sobre los riesgos de trabajar en solitario o aislado, que supone la modalidad de teletrabajo o trabajo a distancia y no necesariamente conocen los tiempos de descanso de que deben disponer. Frente a esta realidad, la ACHS desarrolló la campaña Ofinautas (https://ofinautas.achs.cl/), que busca precisamente cuidar la salud física y mental de quienes están teletrabajando, instaurar una cultura de cuidado y autocuidado en la empresa y sus trabajadores remotos, y contribuir con reducir la cantidad de trastornos en estos trabajadores.
En este contexto, Rodrigo Pinto, especialista Senior en Salud y Seguridad en el Trabajo de la ACHS, comentó que la campaña entrega también criterios y recomendaciones respecto de qué elementos y consideraciones son importantes tener en cuenta para la salud de los colaboradores, tales como:
Silla
– Debe permitir al individuo adoptar una postura correcta y a la vez permitir variarla, proporcionando el espacio necesario para disponer el cuerpo y desarrollar las tareas sin dificultad de movimientos
– El asiento no debe presentar un borde anterior demasiado angulado que presione los tejidos y músculos del muslo hacia la rodilla y así evitar la correcta irrigación sanguínea de las extremidades inferiores
– Lo ideal es que su altura sea regulable
– El ancho del asiento debe estar basado en el ancho de caderas de la persona y debe permitir una adecuada movilidad en el asiento
– La profundidad del asiento debe permitir sentarse correctamente evitando el abandono del respaldo
– El pedestal debe permitir una buena movilidad (giros en 360°), estabilidad y el desplazamiento de la persona en su puesto
– Entre otros
Escritorio
– Uno de los tipos de escritorio más recomendados y utilizados son las de tipo “L” o “escuadra”. Esto se debe a su flexibilidad y espacio disponible para ubicar los equipos y accesorios de trabajo, en especial al aprovechar la diagonal o vértice para posicionar la pantalla de visualización de datos, teclado y mouse. De esta forma se dispone de los espacios laterales para trabajar con documentos
– Otro modelo de plano de trabajo o escritorio corresponde al tipo “recto”, utilizado normalmente en espacios más restringidos y también en aquellas tareas en donde el espacio requerido para realizar las tareas sea menor (tareas administrativas simples, digitación)
– En caso de no contar con un espacio para disponer un escritorio debes utilizar una superficie de trabajo amplia, que permita acomodar todos los elementos de trabajo, una alternativa podría ser la mesa del comedor teniendo la precaución no mezclar los temas domésticos con el trabajo. Para esto una vez terminada tu jornada, ordena y deja libre este espacio.