“Los pescadores artesanales están por la protección del trabajo en términos que es un Recurso Humano consagrado en Chile en la Constitución que nos rige”, aseguraron desde Ferepa Biobío.
Es por ello que declararon lo siguiente: “Estamos también por proteger los recursos del mar, fuente de la cadena alimentaria de toda la población y por ende no estamos de acuerdo en que la técnica de captura como es el arrastre, que utiliza el sector industrial, ponga en riesgo la sustentabilidad de los recursos, el ecosistema y daña el fondo marino como ha sido demostrado por innumerables estudios científicos existentes no solo n Chile sino que en el mundo”.
De acuerdo a la entidad, “cuando en Talcahuano nos sorprendimos con una gigantesca manifestación de los trabajadores del sector industrial, con quema de neumáticos impropios en el sector pesquero artesanal, alzamos la voz tanto por el daño ambiental que esto genera y los problemas en la movilidad de los trabajadores a sus fuentes de trabajo. No obstante, coincidimos en que las protestas son un derecho, pero no lo aceptamos cuando no se defiende el trabajo que para miles de pescadores artesanales que ven un peligro a la sustentabilidad de los recursos que, si se agotan o destruyen generará una cesantía gigantesca y a la que hay que poner atajo”.
El presidente del directorio de Ferepa Biobío, Hugo Arancibia Zamorano, indicó que lo anterior, se generó en rechazo a la moción que se discute en la Cámara de Diputados, “en respuesta a moción de los diputados Marcelo Diaz, Jorge Brito, Camila Roja y Alexis Sepúlveda que repusieron el proyecto que había sido desechado a archivo hace tan solo unos días. Nosotros lo hemos dicho fuerte y claro y en asamblea de nuestra Federación que agrupa a 83 sindicatos de la pesca artesanal del Biobío que con los brazos en alto manifestaron su rechazo y pidieron el término del arrastre en el océano de nuestro país”.
Y finalizó diciendo: “Llamamos a la industria pesquera, a que adecuen sus sistemas de pesca especialmente en el caso de la merluza. Estimamos que se les puede otorgar un tiempo para que lo concreten, de hasta 2 años. El arrastre no puede seguir depredando la fuente de sustento de miles de pescadores artesanales que históricamente han manifestado su rechazo a esta técnica de captura”.
