Mientras hay zonas que dan cuenta de un aumento de arribos, cerca de Cañete aún no llegan pasajeros. Además, existe preocupación por el colapso del sistema sanitario.
Según datos entregados por la Octava Zona de Carabineros, a la fecha existen más de 3.500 solicitudes de ingreso a comunas en fase 2 de Biobío.
Antes de cumplirse la primera quincena de enero, al menos en Dichato, dan cuenta de un mayor flujo de turistas que dan una luz de esperanza a las Pymes turísticas costeras de ese sector.
Así lo afirma José Mora, presidente de la Sociedad Hotelera y Gastronómica de Dichato, quien indica que ha habido un aumento considerable de turistas. “De hecho, ya hay hospedajes que están funcionando con sus respectivos protocolos y permisos”.
El dirigente da cuenta que el día 8 del presente mes habrían alrededor de 1.200 personas tomando sol en la playa, lo que representaría un buen número para iniciar la temporada.
Al ser requerido si es posible que parte de este aumento se pueda explicar como efecto de los permisos de vacaciones para ingresar a Biobío, su respuesta fue positiva.
Pese a que existe una creciente llegada de turistas a Dichato, desde la Sociedad Hotelera y Gastronómica no dejan pasar la oportunidad para informar de algunos problemas con Pymes del área gastronómica.
Lo anterior, a raíz de la imposibilidad para poder habilitar terrazas después de haber incurrido en inversiones cuyo objetivo era mejorar la situación de los comercios del área.
“Hemos tenido desinformación, porque por un lado se autorizó a uno de nuestros asociados para poder atender en terrazas, pero luego se le fueron a cerrar su local, haciéndolo pasar un muy mal rato”, asegura Mora.
A la vez, resalta que ya van más de 8 meses sin trabajar y preparándose para la temporada estival con montos de inversión no menores y sin acceso a financiamientos como el Fogape donde cerrar terrazas provoca mucha frustración después haber logrado avances.
Descontento con la autoridad
Andrés Harun, dueño de Turismo Stella Maris en Talcahuano comenta que no es momento pertinente y oportuno para incentivar vacaciones masivas, a lugares típicos y disponibles, ya que la movilidad que esto implica, a zonas costeras, en nuestro caso con altos índices de contagios “podría llevar a un colapso del sistema sanitario”.
En este sentido Harun apela a que se trata de “un costo demasiado elevado a pagar por la falta de un apoyo real del Estado a las microempresas, lo que obliga a los pequeños empresarios, a salir a trabajar, pese a los riesgos de salud, que implica, aún adoptando y dando cumplimiento a todos los protocolos sanitarios dispuestos”.
En otras palabras, el dueño de Turismo Stella Maris considera quela situación de las Pymes turísticas “no son viables dadas las actuales condiciones sanitarias del país”.
Elba Chanqueo, dueña de “Ruka Lamuen Elba” (restaurante y alojamiento familiar) ubicado cerca de Cañete y a dos horas aproximadamente del lugar conocido como “Piedra del Águila” cuenta que aún no se ha notado la llegada de turistas.
Además de una oferta culinaria rica en tradiciones Chanqueo espera la pronta llegada de comensales que activen su sector.