La pandemia afecta fuertemente al mercado laboral. Durante en el trimestre mayo, junio y julio, cuando el INE registró un 11%, de desocupación, la cifra más alta en los últimos 10 años.
Y en el último periodo, correspondiente a junio, julio y agosto, la situación mejoró levemente, bajando al 10,2%. En ese contexto, los esfuerzos desde el sector público y privado de generar más plazas de trabajo para las mujeres se vieron alterados por la coyuntura.
Actualmente, en medio de la pandemia, el desempleo femenino en el Biobío llegó al 8,5%.Uno muy elevado, si se considera que entre septiembre y noviembre del año pasado el número era de 6,6%. Incluso, el indicador era mucho mejor que el masculino, que anotaba en la misma fecha un 7,2%.
Es por ello que la actual situación se transforma en un desafío, tanto para el Gobierno como para el sector privado.
“Hemos seguido muy de cerca la situación laboral de las mujeres durante esta crisis sanitaria y económico y hemos estado apoyando la empleabilidad con medidas como la Ley de Crianza Protegida, que permite a madres, padres y cuidadores afiliados al Seguro de Cesantía acogerse a la Ley de Protección del Empleo para cuidar a niños nacidos a contar de 2013. Y, por otro lado, esta ley permite la extensión del permiso postnatal parental para madres o padres, cuyo término ocurra mientras dure la vigencia del estado de excepción constitucional”, explicó la seremi del Trabajo y Previsión Social Biobío, Sintia Leyton.
La autoridad regional, además, destacó la línea Contrata del Subsidio al Empleo recientemente anunciado y puesto en marcha tiene enfoque de género, “ya que el monto de subsidio a las nuevas contrataciones será más alto en caso de las mujeres, pero también jóvenes y personas con discapacidad”.
Finalmente, Leyton aclaró que el Bono al Trabajo a la Mujer para las mujeres trabajadoras de entre 25 años y 59 años, “se ha mantenido durante todo este tiempo”.
La gerenta general de Irade, Carolina Parada, destacó las medidas del aparato público. Es por ello, que agregó una segunda línea para las empresas.
“Mirar la cadena de valor de una empresa, privilegiando y fomentando las pymes y mypes que sean lideradas o cuenten con mujeres en sus equipos. Las buenas prácticas de equidad hay que fomentarlas a los proveedores”, pidió la ejecutiva.
Parada también resaltó que “la crisis sanitaria y económica exige sacar nuestras mejores herramientas para recuperar los más de un millón de empleos que han perdido las mujeres en Chile, por tanto, todos tenemos el desafío de incorporar los criterios de género en la tan necesaria reactivación económica. En este sentido destaco el compromiso de diversos gremios regionales como Asipes, CChC y Corma que han declarado compromisos concretos de fomento y cuidado del empleo femenino”.
En ese sentido, Essbio, por ejemplo, ha encabezado lineamientos internos. Desde 2019 cuenta con la Unidad de Equidad de Género, que realizó un diagnóstico y elaboró un plan de trabajo, junto a un equipo multidisciplinario integrado por personas encargadas de los distintos procesos involucrados, posicionando esta temática como una Iniciativa de la Estrategia Corporativa.
El gerente de Gestión de Personas de Essbio, Gian Piero Lavezzo Richards, señaló que en el contexto de pandemia se han desarrollado diversas iniciativas que buscan apoyar y resguardar la salud de las colaboradoras, como identificar los grupos de alto riesgo (embarazadas, personas con enfermedades crónicas, mayores de 65 años), teletrabajo desde el 17 de marzo, que ha sido adoptado por el 80% de la mujeres de la compañía, campaña de recomendaciones para la correcta conciliación de vida laboral, personal y familiar, salud mental, corresponsabilidad y violencia de género, entre otras acciones.
“Trabajar desde antes la temática de género nos ha permitido tomar decisiones y afrontar de mejor manera la pandemia”, puntualizó el ejecutivo.
Fuente: Ine Biobío. Diseño: Andrés Oreña.
