Grupo Inmortales cerró primera cuota a 7 jugadores del plantel y 8 funcionarios, pero muchos quedaron fuera. Están molestos y dan esta Navidad por descartada.
En el plantel de Fernández Vial hay molestia. Al menos en la gran mayoría que esperó crédulo, hasta la medianoche, a ver si había novedad en su cuenta bancaria. Era el compromiso. Estaba pactado y hablaba de tres cuotas correspondientes a sueldos, cotizaciones y finiquitos. Ya están los primeros pagados y son 15, pero el resto está molesto con cómo se priorizó este pago y, sobre todo, porque tenían destinado este dinero para gastos de Navidad. Fe ya no les queda.
Al día siguiente hubo comunicación con el grupo Inmortales y los jugadores cuentan que la propuesta es pagarles de aquí a 7 días, pero solo un porcentaje de ese 60 por ciento total que estaba estipulado. El resto de esa primera cuota recién aparecería en enero. El plantel ya no sabe qué pensar. Necesitan “parar la olla” y pensaban que cobrar más de la mitad de la deuda de una vez era lo mejor. Firmaron eso para ayudar al club.
Miércoles y jueves pagarían a otros pocos jugadores. Los primeros en cobrar fueron los que se quedaron hasta el final, jugando los últimos cuatro partidos. Justamente, con los que no se había firmado nada. En ese grupo aparece el técnico Sebastián Ortiz. Sifup también fue informado inmediatamente de estos primeros pagos.
Inmortales estuvo reunido desde la tarde del martes y en extensa jornada se decidió quiénes debían ser los primeros en cobrar. Ahí se escogió partir por quienes desempeñaron labores en el club hasta octubre y la nueva administración espera la llegada de dineros frescos para seguir en esta línea. También aseguran que el litigio actual con la Corporación no es un tema menor, porque aún deben definirse certezas jurídicas sobre la administración del cuadro ferroviario.
Inmortales aseguró al momento de su postulación en Anfa que hubo extensión en el plazo para presentar el certificado de no deuda y este quedó estrablecido para febrero. Los jugadores de Vial, siempre con dudas, habían acordado antes con el Grupo Glans que si no se pagaba la primera cuota, tenían la instancia de demandar y que les paguen todo de una vez.
Pero no recurrirían a ello y, aunque las palabras que más repiten son “molestia” y “desilusión”, sienten que ir por la vía judicial prolongará aún más la espera. Con mucho desánimo tendrán que estar día a día viendo si cae algo, de un dinero que creían seguro. En Vial, la seguridad es palabra desconocida.