Ambos elencos se medirán desde las 17 horas en El Morro.
Ambos vienen de ganar, y sumar esta tarde en El Morro puede significar prenderse definitivamente en la lucha por el ascenso. Naval y Lota Schwager se verán las caras desde las 17 horas en Talcahuano, en un encuentro donde sólo habrá hinchada local.
Sí, porque el viernes se confirmó que no habrá autorización para que simpatizantes mineros ingresen al estadio, por instrucción de las autoridades. Otro ingrediente que condimenta un duelo con mucha historia, y que tiene dos antecedentes opuestos esta temporada: el primero en febrero pasado, cuando Naval se impuso 4-0 en el mismo Morro, en la final del Octogonal del Biobío. El segundo ocurrió en la fase regular del actual torneo, en su segunda rueda, cuando todos miraban a Lota como invitado. Pese a ello, los del carbón devolvieron la goleada y ganaron por un contundente 3-0 a fines de julio, también en Talcahuano, con tantos de Johan Munives, Frank Silva y Matías Farías.
Ambos equipos tuvieron acción a mitad de semana. En el caso de Naval, se impuso por la cuenta mínima a Imperial Unido, con tanto de Sebastián Garretón, en una victoria que le permitió al ancla cortar una racha de tres caídas consecutivas, donde además no marcó ningún gol.
Por su parte, Lota venció por 2-0 a Ovalle en el Federico Schwager de Coronel, con doblete de Munives. Se trató del primer triunfo de los mineros en la liguilla de Tercera B, donde han mostrado un buen juego pero les ha costado cerrar los partidos.
Con Naval con nueve puntos y Lota con seis, el encuentro de esta tarde en El Morro asoma como fundamental en las aspiraciones de ambos equipos de meterse de lleno en la pelea por el ascenso. Cabe recordar que, hasta el momento, sólo hay dos cupos directos para Tercera A.
Ayer, en el duelo más esperado de la fecha, Imperial Unido y Gol Gol empataron a dos, por lo que, en caso de ganar, Naval podría trepar al segundo lugar de la tabla de posiciones. Si Lota vence, llegaría a nueve puntos, quedando a tres del líder pero con el mismo números de encuentros jugados.