El público argentino no lo podía creer. Ya en Concepción, la UdeC se había plantado de igual a igual ante Obras Sanitarias, en el marco de la primera ventana de la Champions League Americas en diciembre pasado en la Casa del Deporte. Ahora, en la segunda ventana del Grupo D del certamen, el Campanil tuvo un gran comienzo y siempre estuvo arriba en el marcador. En el Templo del Rock en Buenos Aires, supo aguantar sobre todo en el tercer cuarto, cuando más se acercó su rival, y terminó llevándose un triunfazo por 90 a 69. Una victoria que no sólo lo deja con chances de avanzar en el torneo -la última ventana se disputará en Brasil, en febrero-, sino que se instala como uno de los resultados más importantes del deporte regional en una competencia internacional.
En el mismo básquetbol, el Campanil venció a Sao Paulo en la edición 2020-2021 de la Champions League. Un ajustado 76-74 le dio su primera victoria en la competencia, a puertas cerradas en marzo de 2021. Y mirando hacia atrás, igual registró actuaciones para el recuerdo: en 1998 superó a Aguada de Uruguay, en 2000 también a Cordon, de ese mismo país, ambos por Liga Sudamericana, y en 2008 a Regatas de Argentina, en doble tiempo extra, por la Liga de las Américas. Otro quinteto local, Petrox, en 1997, superó a Corinthians de Brasil por 97-92 en condición de local.
En el fútbol también se cuentan algunos resultados que vale la pena recordar. El más importante, el triunfo de Huachipato 2-1 sobre Gremio en Brasil, en su debut en la Copa Libertadores 2013. En ese mismo torneo también empató con Fluminense 1-1 como visita, condición en la que obtuvo 7 de 9 puntos (también venció a Caracas). En la misma Libertadores, Deportes Concepción logró avanzar a octavos de final las dos veces que la disputó (1991 y 2001), y en cada edición tuvo partidos memorables. En la primera, el 3-3 con América de Cali en Colombia, en el duelo de vuelta de la fase de los 16 mejores, y en la segunda el 3-2 sobre San Lorenzo de Almagro bajo un diluvio en Collao, en un partido que tuvo de todo.
Otros duelos a destacar son el 2-2 de la UdeC con Santos Laguna en México en la Libertadores 2004, en el estreno del Campanil en ese torneo, y recientemente las últimas victorias de Huachipato como visita en la Copa Sudamericana: en 2020 se impuso 1-0 al Deportivo Pasto en Colombia y en 2021 venció 1-0 a San Lorenzo en Argentina y 2-1 a 12 de Octubre en Paraguay, con doblete de Walter Mazzantti.
Protagonistas de estos hechos recordaron algunas de estas gestas, y también dieron sus razones de por qué cuesta tanto superar a rivales extranjeros, sobre todo argentinos y brasileños, en cualquier certamen continental.
Cipriano Núñez, entrenador de la UdeC, condujo al equipo en la reciente victoria ante Obras y en 2021 a la que obtuvo ante Sao Paulo. En los noventa, también dirigió al Campanil en otros triunfos internacionales. Del más reciente, destacó que “Nos enfocamos bastante bien, era el todo o nada respecto a la importancia de abrir bien el juego, que tanto nos costó acá. Los chicos lo asumieron y respondieron, defendimos bien y eso nos llevó a tener un equilibrio. Luego de un primer cuarto que ganamos por un punto, trabajamos mejor en varias facetas del juego, con más confianza. Hubo intuición y lectura del juego, que son planos que a veces no se miden en números pero que igual son relevantes. Para nosotros es importante ganar un duelo de una liga así, más aún a un rival de pergaminos, que está muy bien posicionado en la liga argentina, con historia”.
Sobre cómo se trabaja la parte mental en duelos así, aseguró que “creo que hay dos cosas que son importantes de manejar. Una es la confianza que te va dando trabajar a través de un proceso compitiendo internacionalmente. Nosotros lo hemos hecho a través de la Champions League, donde los jugadores se sienten más cómodos, yo lo noto. Los temores, las presiones mentales han ido disminuyendo. Y lo otro es ratificar que tienes nivel para jugar. Una de las cosas que le manifesté al equipo antes de esta ventana era eso, que era momento de poner lo que entrenamos muchas veces… Aunque suene un poco ostentoso, en el camarín les dije que quería ver lo que hacen normalmente en los entrenamientos, pues tenemos algunos de altísimo nivel y superiores a minutos de juegos de esta envergadura”.
En esa línea, agregó que “cuando logramos plasmar eso nos sentimos cómodos, corren las ofensivas, se defiende como practicamos. Un aspecto es que avanzas a través de un proceso cuando compites a alto nivel y luego mostrar el juego que puedes alcanzar, y yo creo que el nuestro permite competir”.
Patricio Briones reforzó a ese Petrox que le ganó a Corinthians, y señaló que “ha pasado harta agua bajo el puente, y lamentablemente nuestro deporte no tiene muchos resultados positivos a nivel internacional. En ese partido, el equipo estuvo maravilloso, pasando por los más avezados como Viafora, Saúl Guerra, Sandro Figueroa e Iván Gallardo, junto con los extranjeros, y los más jóvenes como Arroyo, Soto y ‘Popeye’ (Marcelo Ruiz) también respondieron. Haberle ganado a Corinthians, que era el gran equipo brasileño en ese momento, fue tremendo, un hito para nuestro básquetbol”.
Además, añadió que “el partido fue apretadísimo. Al frente estaba Oscar Schmidt, imagínate el impacto que generó eso, lo que tiene un mérito mayor pues es el mejor jugador en la historia de Brasil. Además, ellos siempre invierten en sus equipos, con planteles diseñados para campeonar en sus países y destacar a nivel internacional. Creo que se nos dio todo y ellos tuvieron algunas dudas”.
La campaña de visita de Huachipato en la Libertadores 2013 fue notable: 7 de 9 puntos, con triunfos ante Gremio y Caracas e igualdad con Fluminense. No logró avanzar a octavos por su mala campaña en casa, donde sólo rescató una unidad. Francisco Arrué, hoy técnico de San Marcos, recordó que “se conformó un muy buen plantel. Se venía de ser campeón en 2012 y yo me sumé en la temporada siguiente. El equipo ya tenía una idea juego, había identidad, jugadores con carácter e hicimos un muy partido en Porto Alegre con Gremio, nos trajimos un excelente resultado que nos permitió ilusionarnos como equipo y también a la gente”.
Del encuentro con Gremio, comentó que “teníamos tranquilidad, estuvimos calmados desde el primer minuto. Cuando ellos hacen el descuento hubo que manejar el partido, sacar carácter. Incluso tuvimos algunas opciones para marcar algún gol más, pero lo más importante es que se ganó. Por supuesto que te provoca felicidad cuando ves que el equipo funciona, todo fluye (…) Creer en uno mismo, en el equipo y en el cuerpo técnico es fundamental. Ahora, uno debe saber que son once contra once, y si tienes carácter puedes competir”.
El sorteo los puso con dos rivales brasileños. El ex volante aseguró que “a mí me gustó. Saber que íbamos a enfrentar a equipos de esa categoría. Tuve la posibilidad de jugar muchas veces Libertadores y Sudamericana, y pienso que siempre es bueno medirte con los mejores, me gusta. Fue muy motivante para mí. Es normal que cuando a un chileno le toca con un brasileño o argentino se crea poco, pero en este caso había un buen plantel y teníamos confianza en que podíamos dar alguna sorpresa”.
En 1991, Deportes Concepción disputó por primera vez la Copa Libertadores. Logró avanzar a octavos de final, donde lo eliminó un América de Cali al que le empató a 3 en Colombia (en Collao cayó 3-0). Juan Carlos Almada, delantero morado, indicó que “siempre digo lo mismo, que la gente de Conce no se tiene que olvidar del equipo del ’90, de Pajón y un montón de chicos que lograron la clasificación. Francisco Beltrán, que para mí es uno de los mejores presidentes de clubes, armó un equipo bárbaro. Claro que nos faltó rodaje, pero hicimos una Libertadores bastante digna, pasando la primera fase y después un partido rarísimo ante América de Cali, donde no se veía nada y allá lo empatamos de gran forma, pudimos incluso ganarlo”.
Sobre la campaña, destacó que “creo que nos faltó un poco de viveza en el partido con América de Cali en Concepción… En ese momento a la Libertadores entraban solo los dos mejores de cada país, no como ahora que juegan cinco, seis, lo que me parece una ridiculez, pero eso es otro tema. Es el mejor torneo de Sudamérica y creo que por detalles no pudimos avanzar una fase más.
En 2001, el “León” volvió a la Libertadores. Jorge Torres, defensa central de ese equipo, comentó que “para mí fueron dos etapas. En la primera, estaba como técnico (Sergio) Nichiporuk, donde no jugué, y en la segunda con don Fernando Cavalleri, que en paz descanse. Ahí empecé a retomar lo que venía haciendo anteriormente. Cuando llegamos a ese partido con San Lorenzo teníamos solo un punto en la Libertadores, pudimos ganar y luego también vencimos a Wilstermann, avanzando por diferencia de goles a octavos, donde perdimos con Vasco da Gama de Brasil, que tenía a Romario”.
Del duelo con San Lorenzo, recordó que “este desafío en casa era vital para seguir en carrera. San Lorenzo era dirigido por Manuel Pellegrini y yo había jugado con su ayudante técnico en Huachipato, con (Rubén) Cousillas. Me tocó convertir, el 2-0 de penal, luego nos descontaron, Carlos Verdugo anotó el tercero y ahí ellos se fueron encima, pero pudimos aguantar y ganamos 3-2. Después hubo incidentes, se fueron en contra del árbitro, le pegaron a Víctor Cancino, le rompieron el pómulo, y eso dejó una sensación un poco amarga, aunque igual estábamos felices. Debíamos ganar como sea, recuerdo que salvé un par de ocasiones de ellos en el área. Ellos igual estaban enojados, pues con el empate mantenían una diferencia con nosotros”.
Tras una gran campaña, la UdeC llegó por primera vez a la Libertadores en 2004. Si bien la campaña no fue buena, el estreno sí fue positivo: igualó 2-2 con Santos Laguna en México, en duelo que comenzó perdiendo 2-0 tempranamente.
Ricardo Viveros dijo sobre el encuentro que “en un momento se pensó que podía pasar lo peor, pues íbamos 2-0 abajo bien temprano, que nos podían golear. Fue un golpe fuerte, pero logramos revertir eso principalmente al hacer el descuento antes del descanso -él marcó el gol-, nos volvió la confianza como equipo para poder lograr un resultado positivo como finalmente ocurrió”.
Sobre esa campaña, analizó que “siempre hay un poco de ansiedad y nerviosismo independiente cual sea el partido. Acá lógico que era más por ser Copa Libertadores. Teníamos ganas de hacer un buen encuentro, y esa tensión como te decía es normal pensando en el desafío, ante un rival de jerarquía, como visita en una Libertadores. Con el paso del tiempo, creo que podríamos haber hecho algo más en esa Libertadores. Teníamos un buen equipo, y los rivales no eran tan superiores a nosotros. Perdimos la posibilidad de avanzar y conseguir algo más como club, y creo que a todos los que le preguntes de ese tiempo te dirán lo mismo, que quedamos con esa sensación de que el resultado pudo ser mejor”.
Más allá de algunos logros recientes, como las Copas América de la selección masculina, lo cierto es que siempre cuesta jugar no sólo con brasileños y argentinos en este momento, sino que con todo tipo de rivales. “Va muy de la mano de lo que entregue el técnico, su mensaje y la convicción que tenga para llegar a los jugadores, convencerlos de que se puede. Eso es lo primero. Y lo otro es la fortaleza mental de los jugadores, sobre todo de los más líderes, experimentados, que se lo puedan transmitir a los más jóvenes”, afirmó Francisco Arrué.
Para PatricioBriones, “es la suma de varios factores. La ecuación no depende solo de un entrenador puntual, o de jugadores o extranjeros determinados, sino que también del famoso proceso. La UdeC, en los noventa, cuando nos fue muy bien, el proceso se respetó y eso tiene que ver con mantener un equipo, una filosofía de trabajo acorde a ese plantel, y Cipriano es un técnico que sabe aprovechar eso. Por ahí la posibilidad de sacar buenos resultados. Los elementos están bien trabajados, y unidos. El equipo igual viene junto hace bastante tiempo, entonces ese conocimiento también es importante”.
Por su parte, Juan Carlos Almada aseguró que “cuando estuve en Chile, Concepción participó con Colo Colo que fue campeón, después fui a Católica y llegamos a la final. Creo que el nivel de jugadores, y no lo digo por mí, pero Católica trajo a Sergio Vásquez, Lunari, el paraguayo Cardozo. En el Conce tuvimos a Adomaitis, Correa. Pasa por lo económico, hoy competir con Brasil y con los equipos argentinos -el fútbol es una burbuja, el país tiene muchísimos problemas económicos- es muy complicado. Luego vino una transición y la selección mostró hace poco que sí se puede competir… Como decía antes, pesa el tema económico. A la distancia, estoy viendo que Católica ha realizado inversiones interesantes, ojalá se plasme en la cancha. El tema es cómo se refuerzan los equipos, por ejemplo en Brasil ves que el Flamengo se trae jugadores directo de Europa”.