Joaquín Gutiérrez salvó el punto en tiempo agregado levantando tras media hora donde Huachipato fue largamente superado.
Hay que quedarse con la mitad llena del vaso. Sobre todo, porque después de la primera media hora parecía que Huachipato se podía traer una goleada desde La Serena. El acero era ampliamente superado, no se encontraba en la cancha y estaba dos goles abajo. En ese momento, los dirigidos de Mario Salas sí jugaron como lo que es cada uno de estos partidos: una final. Y con amor propio, cambiando el dibujo táctico y jugando más que su adversario, lograron un 2-2 que suma. Los siderúrgicos siguen penúltimos, pero recuperaron cosas de ese acero que se extraña.
No pudo partir peor la tarde. Una jugada que incluyó mal pase atrás, error de cálculo de la defensa y no llegar a segundas pelotas terminó en gol a los 9’. El inspirado Leonardo Valencia remató desde fuera del área, su derechazo dio en el palo y Maximiliano Guerrero empalmó el rebote. Nadie de la visita fue a ese balón.
Lejos de despertar Huachipato, el local empezó a jugar al ritmo de Dittborn y Valencia. Gabriel Castellón sacó un buen cabezazo de Aguero a la salida de un córner y, a los 26’, otra vez le dieron todo el espacio a Valencia para que aumentara con tirazo desde fuera del área que se desvió levemente en una pierna de la usina.
Ahí pudo hundirse Huachipato y bajar los brazos, pero no lo hizo y casi descuenta dos veces a través de Palmezano antes de terminar la primera fracción. Recién comenzada la segunda, Israel Poblete fue derribado en el área y Luciano Nequecaur ejecutó para marcar su primer tanto del torneo y romper una sequía como equipo de 447 minutos.
Y si la suerte no los ha acompañado esta temporada, esta vez pudo igualar en la última jugada del encuentro a través de Joaquín Gutiérrez, celebrar el 2-2 y mantener distancias con Wanderers, que había igualado 1-1 con Palestino.
Van 11 fechas sin triunfos, pero el DT Mario Salas advirtió que “se vio lo que uno quiere durante gran parte del partido, desde los últimos 15 del primer tiempo. Empujamos y ahora vienen 5 finales que las jugaremos de la misma forma, no bajaremos los brazos”.