Es cierto que la necesidad era ganar, es verdad que la urgencia en la tabla de posiciones obligaba a Huachipato a volver con los tres puntos desde El Teniente de Rancagua. Pero también es cierto que así como se dio el compromiso ante Audax Italiano, el empate 3-3 obtenido por los siderúrgicos, terminó siendo de un dulce sabor.
El comienzo del partido fue de terror para los dirigidos de Juan José Luvera. Corrían recién 3 minutos cuando una centro medido de Michael Fuentes desde la derecha, fue capitalizado por Rodrigo Holgado, que le ganó por arriba a los centrales acereros para ubicar un cabezazo en el ángulo de Gabriel Castellón.
Los dueños de casa se mostraban determinados a afianzarse en el liderato, dictando las reglas en una cancha donde se han mostrado intratables en lo que va de campeonato. Así llegó el minuto 19 y el segundo golpe de los audinos, otra vez por intermedio de Holgado, quien luego de un tiro de esquina de Figueroa, aprovechó un cabezazo de Labrín para empujarla a boca de arco y decretar el 2-0 parcial.
A esa altura, la cara del técnico acerero lo decía todo: justo cuando mejor debían jugar, sus dirigidos parecían haberse quedado en el camarín. No se veía por dónde.
Arremetida acerera
Pero el fútbol ofrece oportunidades, y tan solo tres minutos después, un desborde de Rodríguez por derecha terminó en un pase interceptado con la mano por Fabián Torres. El capitán Claudio Sepúlveda se encargó de convertir el penal y con ello meter en el partido a un Huachipato que parecía extraviado.
Más aun, en los 30’ llegó la igualdad de los huachipatinos a través de Maxi Rodríguez, quien conectó con un perfecto cabezazo un centro de Gutiérrez, otra vez desde la derecha. Era el renacer, la misión parecía posible y así lo mostraba Poblete, que servía un tremendo tiro libre que el arquero audino sacó de manera brillante al córner. Para la historia quedará un posible penal contra Rodríguez, que el árbitro intentó chequear en un monitor del VAR que se apagaba. Solo en Chile.
El complemento mostró un duelo algo más parejo, con Huachipato intentando practicar su fútbol ofensivo. Pero en frente tenía un duro rival, que volvió a ponerse arriba a los 64’ cuando otra vez se durmió la zaga acerera y Fabián Torres marcó de cabeza el 3-2, dejando a su equipo como solitario líder.
¿El problema? Huachipato no dejó de luchar y en los 78’ el recién ingresado Claudio Torres aprovechó un rebote del meta Muñoz para anotar el 3-3 definitivo. Claro, los de Luvera siguen antepenúltimos en la tabla (8 puntos), pero con la certeza de que si quieren, pueden levantar.