Si hay una virtud que la UdeC había mostrado en el inicio del campeonato nacional de Ascenso, era su poder de fuego, esa gran capacidad de acercarse al arco contrario y hacer daño; cinco goles en dos partidos, así lo mostraba. La gran duda, sin embargo, era la aplicación de su defensa, que en esos encuentros dejó ir victorias casi seguras debido a desaplicaciones en los últimos minutos.
Y si bien este último ítem no se solucionó del todo en el duelo disputado ayer en Calama, esta artillería ofensiva le bastó al equipo de Hugo Balladares para amarrar su primera victoria de la temporada por un expresivo 4-2 sobre Cobreloa.
Tan meritorio es que a los loínos le marquen cuatro goles en su feudo, que hay que remontarse exactamente seis años en el tiempo para hallar una situación similar. Específicamente al 26 de abril de 2015, cuando por el torneo de Primera División Colo Colo le endosó un categórico 4-0 en el norte.
Desde ahí nunca más. Hasta ayer, cuando los goles de Mauro González (24’), Luis Riveros (34’), Lionel Altamirano (46’) y Richard Barroilhet (90+1), marcaron la merecida victoria para el Campanil, que ni siquiera fue amenazada por los descuentos de David Escalante (79’) y Gabriel Tellas (97’) a través de lanzamiento penal.
Triunfo que le permite a los universitarios mantenerse invictos en el actual certamen y, con cinco puntos, permanecer en el grupo de avanzada, con perfil de serio candidato si consigue mantener en el tiempo el sólido nivel futbolístico exhibido hasta ahora.
Satisfecho con las mejoras mostradas por el plantel se mostró el entrenador auricielo, Hugo Balladares, quien alabó la concentración de la zona defensiva en los pasajes complicados del duelo.
“Es un partido que nos deja muy conformes por lo planificado. Sabíamos que tal vez el control del juego no pasaría por nosotros, pero que debíamos aprovechar las oportunidades de gol. Nos hemos creado muchas opciones en estos primeros encuentros y era importante mantener esa tendencia, y que, en el momento de no tener la pelota, todos pudiéramos aportar; eso fue clave para quedarnos con el triunfo. Tenemos que conseguir un equilibrio, los equipos que logran cosas importantes son los que tienen una seguridad defensiva permanente, y es algo que debemos seguir solucionando”, manifestó.
“En muchas partes del partido lo tuvimos controlado, no nos profundizaron tanto, las pelotas que llegaron al área fueron bien controladas por nuestros defensores y cuando debió intervenir nuestro arquero, estuvo impecable. Gracias a mucha concentración pudimos sacarlo adelante”, complementó.
Detalles que con miras al próximo desafío ante Rangers, esperan seguir puliendo como equipo, según el técnico. “Durante la semana deberemos seguir ajustando ese tema. Esta vez la principal fortaleza fue el aspecto actitudinal y mental, convencernos que somos capaces de enfrentar las dificultades”, sentenció Balladares.