Los Pelicans y los Jazz están planteando la posibilidad de arrodillarse juntos durante el himno estadounidense antes del partido que les enfrentará este viernes en la reanudación de la NBA.
En lugar de hacer dos protestas por separado ante las injusticias sociales se pretende mostrar una sensación de unidad entre los jugadores, los equipos y toda la NBA.
La Liga siempre ha hecho valer la norma que dice que el “los jugadores y entrenadores deben pararse, alinearse y mantener una postura digna a lo largo de la línea lateral o en la línea de personal durante la interpretación del himno nacional“. Sin embargo, en este caso la Liga es la primera concienciada con el lema “Black live matters” y las protestas sociales, con lo que es de suponer que no habrá sanciones.
Algunos jugadores insistieron en que no querían reanudar la competición para no distraer la atención de la lucha por la justicia social. Desde su llegada a la burbuja de Disney World, han utilizado la atención a los medios para pedir justicia a las víctimas de la brutalidad y el racismo policial y para alentar a los aficionados a votar en las próximas elecciones presidenciales. Durante los partidos también lo harán aprovechando la atención de medios y aficionados.
Todo esto, con la amenaza vigente del presidente Donald Trump, quien hace unos días dijo que si alguno se arrodillaba durante el himno en el torneo, “la fiesta se acababa para él”.