Bruno Fernandes de Souza, ex arquero de Flamengo y que en 2010 fue condenado a 20 años y nueve meses de prisión por el asesinato de Eliza Samudio, quien era su mujer, retornará al fútbol luego de aprovechar un régimen de libertad vigilada y firmar por el Río Branco-AC, club de la Serie D de Brasil.
Neto Alencar, presidente de la institución, hizo el anuncio en su cuenta de Instagram como “una de las mayores contrataciones en la historia del club”. Y agregó: “Él llega esta semana a nuestra capital. Quiero darle la mejor de las bienvenidas y que consiga llevar al equipo al título del Acreano y el acceso a la Serie C”.
Poco después de conocerse el anuncio, comenzaron las manifestaciones sociales en contra. Río Branco queda en uno de los estados con mayor tasa de femicidios, lo cual potenció la reacción. De hecho, desde que Bruno (35 años) salió de la cárcel hubo por lo menos intentos de contratación que debieron anularse por el rechazo popular.
En 2017, llegó a jugar cinco partidos para Montes Claros, pero luego la Justicia ordenó que volviera a prisión. En 2019, jugó 45 minutos para Poços de Calda, pero después rescindió. En enero de este año había arreglado con Operário-MT, pero el club dio marcha atrás porque un patrocinador retiró el auspicio.