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El retorno de Huachipato a las prácticas no estuvo exento de polémica

La visita del seremi de Salud no le impidió al acero volver a entrenar en su estadio. Bajo estrictas reglas sanitarias y varias críticas, el plantel retomó ayer las prácticas en el CAP.

Por: Carlos Campos 02 de Junio 2020
Fotografía: Huachipato FC

Hasta que llegó el 1 de junio en Talcahuano. Una jornada movida en el CAP Acero marcó la vuelta a las prácticas de Huachipato. Fue un retorno atípico, con estrictas reglas sanitarias para prevenir contagios entre plantel, cuerpo técnico y otro tipo de funcionarios.

¿Podían?

Sí. Pese a lo reprochable que puede ser volver a los entrenar en un país que ayer informó la muerte de 59 chilenos y el contagio de otros 5471 en las últimas 24 horas, nada podía impedir el retorno acerero a las prácticas.

Y la razón es simple. Al no estar Talcahuano en cuarentena, grupos menores a 50 personas se pueden reunir sin problema. Huachipato apeló a ese argumento, aunque no por ello dejó de tomar las medidas sanitarias para proteger la salud de un plantel que en su totalidad no estaba contento por volver, pero sólo debió acatar.

Así, al no infringir ninguna regla, en el club alistaron el retorno a las prácticas con alcohol gel, guantes, mascarillas, la prohibición del saludo entre compañeros y de utilizar el camarín. Se entrenó en grupos de 7 futbolistas y tres integrantes del área técnica (ver imagen principal), todos con distancia. Y lo que era un feliz y tranquilo retorno, con el paso de los minutos se comenzó a agitar.

“Vamos a suspender”

El primer grupo de jugadores fue citado a las 8 am. y fue pasadas las 10 de la mañana, cuando al estadio CAP llegó Héctor Muñoz, seremi de Salud. La autoridad regional entró al recinto y conversó unos minutos con Jorge Correa, gerente general del club. La visita tenía sólo un gran objetivo que él mismo explicó a la salida del estadio: “Vamos a hacer una suspensión. No nos ha llegado un protocolo antes y encontramos unas observaciones que queremos mejorar y aclarar junto a ellos. Me enteré esta mañana de que acá habría un entrenamiento”, dijo el seremi de Salud del Bío Bío, sobre una idea que hace un mes ya era pública.

Tras sus palabras, no había dudas. El entrenamiento se había parado y el “gallito” lo ganaba la autoridad. Pero tras él, Jorge Correa habló y aseguró que “mostramos al seremi los protocolos y precauciones que hemos tomado para la protección de nuestros trabajadores. Hemos recibido modificaciones menores, como colocar una tapa en un basurero. Ante esto, él nos recomendó suspender el entrenamiento, cosa con la que no estamos de acuerdo, ya que no existe la suspensión. Hay una clausura o habilitación, por lo que tomamos la determinación de continuar con las prácticas”.

Fueron minutos de confusión no sólo en Talcahuano, sino que en todo el país. No hubo club del fútbol nacional que no estuvo pendiente durante el mediodía de ayer a lo que pasaba con Huachipato. En el acero trabajaron y planificaron para volver a entrenar poniendo énfasis en cumplir con todas las medidas sanitarias de un protocolo que, pese a no tener respuesta desde el nivel central, igual respetaron. Desde afuera, por mientras, observaban en silencio.

“Arrancamos siguiendo todos los protocolos, manteniendo distancia y cuidando la salud. Fue cómodo el entrenamiento y me sentí seguro desde que entré al club, con los guantes, mascarillas y hasta con la sanitización del auto. El esfuerzo que está haciendo el club es bueno y ojalá podamos seguir así”, dijo Juan Sánchez Sotelo, delantero de Huachipato, tras la práctica.

Última reunión

Cuando terminó la práctica, no hubo música en el camarín ni nada de eso. Cada jugador tomó su auto, se fue a casa y recién ahí se duchó. ¿Líos terminados? nada de eso. Fue un lunes de mucho trabajo en el CAP y recién una reunión a eso de las 16 horas en Talcahuano terminó por zanjar todo.

La intención de suspender que tenía la autoridad sanitaria sólo quedó en eso. Un inspector de la Seremi llegó al CAP en la tarde y tras una reunión con la directiva del acero, finalmente se determinó que no había problemas para que el plantel continúe entrenando. Así, hoy Huachipato vivirá una nueva jornada de prácticas, seguramente igual de fría que ayer, aunque menos polémica que la de un bullado 1 de junio.

¿Corte de Apelaciones?

Hace un par de semanas hubo una resolución a nivel judicial que limitaba todo tipo de actividades deportivas, artísticas y religiosas. En ese contexto, ¿corren peligro las prácticas acereras? “Eso se levantó y sólo quedaron restringidas las actividades religiosas. Así lo indica el documento. La única restricción en este caso, es la limitación de las 50 personas”, cerró el seremi.

Guste o no, si Huachipato no pasa tal cifra y si Talcahuano no entra en cuarentena, en el acero no tendrán problemas para seguir entrenando.

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