Opiniones divididas en torno al posible pronto retorno a los entrenamientos en el fútbol chileno. Mientras algunos sienten que es una medida necesaria, para otros sigue siendo muy riesgosa. Plantel de UdeC, por ahora, está de vacaciones.
Mientras el fútbol busca su propia normalidad en días donde las cifras de contagiados aumentan en todo el país, hay clubes contentos con la opción de retomar paulatinamente los entrenamientos, pero otros donde hay jugadores que no están del todo convencidos.
“Se extraña el camarín y el día a día, pero mira todo lo que está pasando con el coronavirus en todo el mundo. A nivel futbolístico, obvio, nos perjudica mucho, porque de estar jugando, estaríamos muy expuestos y la salud siempre será lo más importante. Siento que es muy apresurado volver a entrenar, ya que el virus sigue ahí. No es que el tema esté controlado ni mucho menos. Por más que te cuides, te puedes contagiar igual. No existen los resguardos necesarios para volver a la actividad”, dijo el lateral de UdeC, Guillermo Pacheco.
A la espera de novedades sobre un posible pronto retorno a las prácticas, en el Campanil disfrutan unos días de vacaciones, tras pasar un par de semanas trabajando, desde el punto de vista físico, mediante videollamadas. “No nos han dado fechas en torno a cuando sería el retorno a las prácticas presenciales. En principio, recién a mitad de este mes volveríamos al teletrabajo”, dijo el lateral auricielo de 31 años.
Considerando que, cuando sea el retorno oficial a jugar, la opción más probable es que la cantidad de partidos aumente en un período corto, la Fifa sugirió la opción de que cada liga analice si aumentar de tres a cinco las modificaciones en cada encuentro. La idea es evitar un desgaste físico en los planteles, en términos de que para alcanzar a cumplir con el calendario, seguramente, la programación incluirá partidos un miércoles y domingo de la misma semana.
A los jugadores, ¿qué les parece tal idea? Pacheco afirmó que “dos cambios más no influyen en nada. Si quieren sugerir algún cambio real o distinto, sería con 8 cambios por partido o algo así, pero es ilógico esa cantidad de modificaciones en un partido. El futbolista en sí, en base a la experiencia mía, de jugar Copa Libertadores y Torneo Nacional en poco tiempo, sufre con el tema físico y esto pasa la cuenta. La idea es que no se nos sobreexija tanto con el fixture. Siento que, de todas formas, el campeonato funcionará bien cuando toque volver”.
Por el lado de Huachipato, Diego Oyarzún, defensa de la usina, dijo que “todos los planteles son medianamente grandes como para poder afrontar una gran cantidad de partidos. Depende de cada jugador y cuerpo técnico, tener a todos los integrantes del plantel operativos, concentrados y metidos en lo que el equipo necesite. No creo que sólo dos cambios más te inf luyan en el desarrollo de un partido”.