Una relevante actuación cumplieron las paletas locales, Paulina Vega y Felipe Olivares, que aportaron con seis medallas a la histórica corona conseguida por el equipo nacional.
Toda una demostración de poder dio la selección chilena de tenis de mesa, luego de quedarse con el título del Campeonato Sudamericano Adulto, desarrollado recientemente en Argentina.
Los mejores equipos del subcontinente se reunieron en Buenos Aires para disputar el torneo clasificatorio al Panamericano de Paraguay, que se llevará a cabo en septiembre. Y, entre todos ellos, fue Chile el que sacó a relucir su mejor juego, para terminar encabezando con solvencia el podio.
Un logro que contó con la destacada actuación de las paletas de la Región del Bío Bío, Paulina Vega y Felipe Olivares, que aportaron con sendas medallas para la histórica conquista del seleccionado criollo que terminó colgándose seis oros, tres platas y otras seis preseas de bronce.
El camino para los exponentes de la Región partió con Paulina Vega, quien en compañía de Nicolás Bustos, se consagró campeona del doble mixto, derrotando en una final chilena a Judith Morales y Manuel Moya, con parciales de 11-7, 5-11, 11-9, 11-5.
Luego, fue el turno del angelino Felipe Olivares, levantando la copa en el dobles masculino junto al mismo Burgos, luego de vencer en la definición por el oro a los argentinos Santiago Lorenzo y Francisco Sanchi (3-2).
La selección nacional mantuvo el tranco en la categoría individual femenina, donde Paulina Vega se consagró como nueva campeona sudamericana venciendo en la final a la también chilena, Daniela Ortega, por 4 sets a 2.
En su ruta a la presea dorada, la sampedrina tuvo un tranco avasallador, dejando en el camino a su compañera Judith Morales (4-0), a la brasileña Lima Livia (3-0) y a la paraguaya Leyla Gómez (4-0).
La mejor noticia es que tanto Vega como Ortega, por haber llegado a la final, clasificaron directamente a a la Copa Panamericana 2020.
A eso, se sumó el bronce de Olivares en la serie individual masculina.
La producción regional continuó con el título por equipos femenino, que lideró Paulina Vega, además de Daniela Ortega, Judith Morales y Valentina Ríos. Tras haber ganado su grupo, el equipo nacional derrotó a Brasil en las semifinales por un marcador global de 3-1, mientras que por el oro superó a Colombia con otro 3-1.
Vega (junto a Morales) entregó el primer punto derrotando a María Perdomo y Cory Téllez en el dobles, y además, cerró la tarea dando cuenta de Téllez en el singles.
La última presea llegó en equipos masculino, donde Felipe Olivares, Manuel Moya y Nicolás Burgos lograron el bronce tras derrotar en la disputa por el tercer lugar a Perú.