22 equipos participaron del torneo escolar más importante de la Región durante el 2018. Las tres categorías, el alto nivel de competencia y la necesidad de fomentar un deporte colectivo adicional al fútbol y al básquetbol, hicieron del vóleibol una tremenda alternativa para los estudiantes.
Dentro de los deportes colectivos, el vóleibol es una de las disciplinas que con el paso de los años se ha subido al podio nacional, tras el fútbol y el básquetbol.
A nivel regional, con el objetivo de potenciar la práctica del vóleibol en colegios y liceos, la Asociación Deportiva Integrada y Cultural de Colegios Particulares (Adicpa), ha posicionado a este deporte como uno de los colectivos esenciales y con el paso de los años, han sido más los equipos que se suman a participar de este campeonato que se desarrolla durante el año.
En 2018, fueron 22 los colegios que se inscribieron para competir en el certamen escolar. “Este año tuvimos una excelente participación. Los 22 equipos fueron una cifra no menor para un deporte que no es de los más masivos en el país. Sin embargo, debo destacar que los colegios se han preocupado de incentivar la práctica del vóleibol en sus alumnos, situación que nos deja muy satisfechos”, explicó Edgardo Jara, coordinador del área de vóleibol de Adicpa.
Para ordenar el torneo, Adicpa decidió crear tres categorías de competición. La primera fue la competencia mini, que es de carácter formativo y lúdico, no competitivo, con el objetivo de generar encuentros para que los colegios se inscribieran y participaran con sus alumnos en una adaptación al vóleibol llamada mini volley, que es una cancha más pequeña y con una red distinta, además de un balón con menos peso.
“En 2018 realizamos 4 encuentros masivos de mini volley donde participaron cerca de 15 colegios. Organizamos dos eventos en el primer semestre y dos en el segundo”, explicó Edgardo Jara.
La categoría infantil es una categoría competitiva donde el mejor equipo del torneo Adicpa del primer semestre representa a la Región en los juegos provinciales y regionales del Instituto Nacional del Deporte (IND).
El segundo semestre, en Adicpa, la Sub16 y Sub17 se transforman en selecciones de una estructura abierta. Eso les permite a los colegios el participar con sus alumnos que tienen 18 años o hasta 19 años sin inconvenientes.
El nivel de competencia durante el 2018 estuvo de alto impacto. El talento y sacrificio de los jóvenes deportistas fue más que destacable, pero sólo algunos colegios lograron subirse al podio. En la categoría infantil damas, Colegio San Ignacio se quedó con el primer lugar. Los otros ocupantes del podio fueron el Colegio Saint John’s y el Colegio Alemán.
A nivel de selecciones el primer lugar lo ocupó el Colegio Alemán, el segundo puesto fue para el Colegio Almondale San Pedro y la tercera ubicación para el Colegio Concepción San Pedro.
En selección, el equipo que había ganado en damas fue el Colegio San Ignacio, pero para jugar el campeonato de las finales tuvo que resignar el cupo y se siguió con el orden.
En varones, el primer lugar en infantiles fue para el Colegio Concepción San Pedro, la segunda posición fue para el Colegio Fraternidad y el tercer puesto se lo adjudicó el Colegio Salesiano.
En selección varones, el primer lugar fue para el Sagrados Corazones, el segundo para el Salesianos y el tercero para el Colegio Fraternidad.
“Este año tuvimos un nivel de competencia muy elevado. Los tres primeros lugares en cada categoría demuestran que hay colegios que se destacan por sobre otros. Sin embargo, con el paso de los años, el nivel de competencia se ha equiparado. Así lo reflejaron los resultados en cada una de las finales donde los marcadores fueron muy estrechos en algunos de los encuentros”, indicó el coordinador de vóleibol de Adicpa.
Foto por Lukas Jara M.
La buena disposición de los colegios para generar los encuentros deportivos en sus gimnasios permitió organizar mejor la competencia. Jugar partidos en simultáneo le dio mayor continuidad al campeonato, lo que permitió generar encuentros de manera mucho más regular.
El nivel del campeonato fue óptimo. Algunos colegios están asociados a clubes, como por ejemplo el San Ignacio con la Universidad de Concepción, situación que eleva el nivel de los jugadores en algunos casos y que permite que existan colegios que colectivamente sean mejores que otros. “Esto hace que los jugadores que se encuentran en entrenamiento constante tengan mejor rodaje que sus compañeros. Es una situación que no se puede controlar, pero que no es necesario detener, pese a que se marcan importantes diferencias”, consignó Edgardo Jara.
Foto por Raphael Sierra P.
Para el año 2019, existen varias expectativas en la organización del vóleibol de Adicpa. Una de las ideas principales es poder generar un mayor número de encuentros a nivel formativo para potenciar los niveles de iniciación (mini e infantiles).
En general, va en aumento la participación a nivel de selección, por lo que el equipo organizador quiere fomentar el vóleibol desde la categoría de menor edad.
“Queremos generar un trabajo especial para realizar clínicas y encuentros recreativos con el fin de potenciar este esquema. Es algo que no implica mayor dificultad y con las ganas que tenemos de seguir trabajando, lo podemos lograr”, explicó el coordinador.
Potenciar el vóleibol y sumar más alumnos participantes son otras metas a cumplir. Tanto colegios como padres deben tener un compromiso con el físico y la inclusión de sus pupilos hacia práctica del deporte.
Entre abril y mayo debiera comenzar la nueva temporada, cuando los colegios den inicio a sus actividades extraescolares. “Para 2019 tenemos grandes desafíos. Con buena disposición de las instituciones y orden en nuestra organización, podremos tener un gran año de vóleibol”, cerró Edgardo Jara.