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Atletas de alto rendimiento: las claves de su rutina

Por: Diario Concepción 26 de Febrero 2018
Fotografía: Diario Concepción

R. Cárcamo/C. Campos

Siempre se dice que con el talento no basta para destacar a un alto nivel en cualquier disciplina. O bien, que sólo con las habilidades naturales el éxito que se pueda conseguir, sin un trabajo serio y planificado a la par, es un triunfo pasajero. Y al analizar cómo son las rutinas de los atletas de alto rendimiento en Chile, son palabras que se confirman.

En nuestro país, lo primero que se debe tener claro es que son pocos los profesionales de su actividad, que viven tranquilamente practicando un deporte. Más allá de esto, quienes están en un primer nivel competitivo cumplen con programas que, junto al entrenamiento propiamente tal, se complementan con lo alimenticio y el descanso.

En la actualidad, Felipe Cárdenas es uno de los mejores exponentes del remo nacional. Al momento de comentar cómo es su día normal, detalló que “me levanto a las 7 a desayunar, luego reposo un poco antes de entrenar. Practico entre 8 y 9 (depende del día y de lo que toque), después como algo y descanso hasta la hora de almuerzo, que es entre 12 y 13 horas. Descanso hasta las 16 horas aproximadamente, entreno otra vez entre 17 y 18. Por último, ceno y me voy a la cama a esperar el día siguiente. Intento dormir ocho horas diarias”.

De su alimentación, señaló que “es a base de carbohidratos, eso es lo primordial. Nos asesora la nutricionista del CAR de Santiago a todo el equipo de remo. Al día estaré quemando unas 3.000 calorías. La base de mi dieta es carbohidratos, y eso se combina con pollo, pescado y verduras. Es desayuno, colación después de entrenar en la mañana, almuerzo, colación previo al entrenamiento en la tarde, y la cena tras la última práctica”.

De las rutinas en el vóleibol nacional, Jorge Facchini, técnico del Deportivo Alemán, comentó que “de lo que conozco, hay pocos clubes que realmente tienen una sistematización de iniciar una temporada, de trabajar con preparación física, de tener nutricionista, apoyo de un psicólogo, o por lo menos tener un preparador físico y un cuerpo técnico. El común denominador es entrenar en un turno, y no más de tres veces por semana. En el caso nuestro, es al revés, pues hacemos doble turno hasta que empiecen las clases, acumular el mayor volumen de trabajo y así sumar para desarrollar los principales parámetros y capacidades físicas, tanto metabólicos como específicos en ganancia de la fuerza y la potencia propia del deporte, y todo lo que es lo neuromuscular, la velocidad. Además, hacemos controles de peso y como vuelven después de vacaciones, evaluamos estos aspectos”

La atleta Margarita Masías indicó de su rutina diaria que “en la mañana me levanto pensando en el entrenamiento, que es a las 10 horas. Me levanto a las 8 y preparo todo, desayuno. Termino tipo 12 y me voy a la casa a almorzar. Ahora estoy trabajando menos, y lo hago por lo general de 18 a 20 horas, con los grupos runners que tengo. Antes, tenía talleres más temprano y era más cansador, altiro después de almuerzo, 15.30 o 16 horas, y no podía practicar doble jornada. Ahora, estoy sólo con un grupo, tres veces por semana, y algunos días hago doble jornada, en la tarde, con un trote de 40 minutos o puede ser trabajo muscular, de pesas”. 

Todos contigo

Cárdenas destacó que si bien de vez en cuando se da un gusto, por lo general es muy estricto en seguir su régimen. “Cuando estoy a dieta por la competencia no, pero en periodo base sí, pero tampoco es algo que coma hasta reventar. Sólo algo que se me antoje. Cuando se está en algún torneo, cero antojos o gustos. ¿Qué hago cuándo me dan ganas de algo así? Fuerza de voluntad, pienso en el objetivo en la medalla de oro. Qué es un gustito al lado de algo por lo cual has sacrificado mucho. El objetivo es mayor”.

En eso. señaló que es clave tener el apoyo de su familia y entorno. “Del día uno me han apoyado, y ya llevo 13 años remando… Tampoco tomo trago, nunca. Además, cuando estoy en casa y con dieta especial igual me ayudan”.

Jorge Facchini reafirma lo anterior, confirmando lo fundamental que resulta el apoyo de los cercanos. “Cuesta mucho que el deportista lo entienda y se eduque, principalmente porque el entorno no acompaña. Los amigos, la familia, deben contener y acompañar. Aquellos deportistas que llegan y se destacan es porque la familia ha sido el primer sostén, y su círculo se siente identificado y es par o acompaña, entiende lo que debe hacer”.

Al respecto, agregó que “la realidad general es que las deportistas, en el caso nuestro, son una excepción en relación a sus compañeras. ‘Como no vas a salir a carretear, a tomar alcohol’. Acá se ingiere mucho alcohol. En Chile, la gran evolución debe pasar por una educación deportiva. Si yo quiero hacer un deporte de manera sociorecreativa, las condiciones son otras”.

Margarita Masías igual coincide y aseguró que “el año pasado trabajé mucho en la tarde, entonces no hacía doble jornada. Y con la alimentación empecé a buscar nutricionista. Con el sistema de entrenamiento que tengo ahora no puedo hacer muchas cosas más, entonces este año pretendo trabajar menos. No todo el mundo puede, y en mi caso tengo una pareja (el odontólogo Francisco O’ Hara) que me apoya mucho y es posible”.

Además, admitió que, en su caso, lo que más le costaba era compatibilizar su rutina de entrenamiento con lo laboral. “Me pasó en años anteriores que los resultados los podía mantener hasta fines de marzo, primera semana de abril, en el Grand Prix. Luego subía mi carga de trabajo y bajaba un poco mi rendimiento. Si quisiera sólo mantenerme en el atletismo, podría hacer las dos cosas, pero mi idea es ir por objetivos mayores”.

Tentaciones moderadas

Para cualquier persona, darse un gusto con alguna comida es algo normal. Sin embargo, los deportistas de alto nivel coinciden en que en su caso es muy esporádico.

“Tengo que mantener un peso, acorde a la distancia que corro. Es medio fondo, obstáculos, entonces si peso más, más me cuesta moverme. Hay que tratar de equilibrar las comidas a media tarde y en la noche. Cuando llego a las 20 horas, no hay que excederse, y es complicado porque te da hambre, pero con la nutricionista regulo las porciones y el tipo de comidas”, dijo Masías.

Respecto a “tentaciones alimenticias”, indicó que “lo hago, pero de vez en cuando. Ahora no puedo, porque estoy un kilo sobre mi peso ideal, que es 46 y estoy en 47. Si me quiero comer un dulce, lo reemplazo por algo que me tocaba en la once, no pueden ser ambas cosas. Hay que ir jugando con las calorías, y la calidad de las comidas”.

Carlos Lampe, arquero de Huachipato y seleccionado boliviano, también señaló que se pueden dar gustos, pero con moderación.

“Uno se acostumbra a llevar un ritmo alimenticio muy bueno y no tiene sentido comerte cuatro completos de un saque. Cuando quieres darte un gustito, hay que volver rápidamente a la rutina alimenticia. En mi país también hay mucha comida ‘chatarra’, y en Chile los completos están en todos lados y son una tentación, porque comes rápido y barato, pero hay que pensar en la salud. No comer frituras porque hacen daño y no sabes cuántas veces usan el mismo aceite. Mi mujer se encarga de mi alimentación”.

Ronald de la Fuente, lateral de la UdeC, reafirmó lo anterior y señaló que “en la casa mi señora es fundamental, porque sabe lo que tiene que preparar, las comidas que ayudan a mantener un buen peso y forma física para el alto rendimiento. Se deben comer legumbres, pescado, fruta. Son cosas que la gente no ve, pero son parte fundamental de nuestro trabajo. Si comiste en Mc Donalds y al otro día tienes que correr en el entrenamiento, se nota y no es lo mismo”.

El rugbista Sebastián Otero comentó que “hay que dejar el azúcar de lado, estuve de cumpleaños hace poco, tengo la torta en la casa y no quiero comer. O sea, saqué un trozo chico y en el fondo me la quiero comer toda, pero no puedo. En el año es súper difícil, porque como estoy en la universidad salgo de la clase y afuera venden completos y empanadas. Al final, termino comiendo un taco, dos huevos o un cereal bar. Trato de comer sano para no tener hambre. Es pura fuerza de voluntad”.

Descansar y cuidarse

Dentro de la rutina de un deportista de alto rendimiento, las horas de sueño y tomar medidas para evitar lesiones también asoman como muy importantes. “Debo acostarme temprano, a las 12 máximo, porque a las 8 hay que estar en pie y tratar de dormir mínimo 8 horas. Si duermo siesta, mejor”, señaló Margarita Masías.

Además, la atleta destacó que acomoda su vida social a sus entrenamientos. “En el verano sobre todo, que la mayoría tiene tiempo para carretear, salí una vez creo, pero máximo hasta las 2 de la mañana y tiene que ser un sábado, pues el domingo me toca un trote que es más suave. Y para no perder mi círculo y el de mi pareja, lo que hacemos es nosotros invitar a nuestra casa, entonces ahí me puedo ir a acostar a la hora que quiera. Pero nos arreglamos, empezamos la vida social más temprano”.

Pedro Morales, volante de la UdeC, señaló que “me cuido demasiado. De repente quizás exagero un poco y mi familia me cuestiona , pero es lo que me ha llevado a estar en grandes lugares y buenos equipos. Tuve la posibilidad de estar en otros países con distintas culturas y clubes bastante exigentes donde aprendí mucho, como la MLS, España y Croacia. Hay que dormir mucho, dormir siesta. Igual tengo unas máquinas de compresión en mis piernas que me la compré en Estados Unidos hace un par de años y eso me ha ayudado bastante”. El rugbista Sebastián Otero dijo que “nunca en mi vida he tomado un cigarro y con el trago, carreteo súper poco, con suerte una vez al mes. Salgo poco. Si tomas el fin de semana y el lunes entrenas, valdrás callampa (sic). Si te golpeas o te desgarras y estás deshidratado, el cuerpo es más propenso a lesionarse, sobre todo en un deporte duro como el rugby”.

Por su parte, Ronald de la Fuente comentó que “como profesional evito trasnochar. Para mí, el alcohol y el cigarro no pueden estar por ningún motivo de la mano con el fútbol. No tiene sentido. A veces, en ocasiones, hay momentos para beber un poco, pero nunca en exceso, ‘poco y de calidad’ decía un profe. Yo no lo hago, pero no digo que no se puede hacer”

Jorge Facchini reafirma lo anterior, asegurando que “hay momentos y momentos, pero el deportista debe tener una madurez. En categorías Sub 18, Sub 16, lo primero es aprender a controlarse, a medirse, y después tener esas pequeñas licencias. Por ejemplo, nosotros hemos visto a deportistas que les cuesta mucho mantener su condición física, porque quieren hacer todo: competir en buen nivel, destacarse, pero a la vez carretear. En la semana, les cuesta convivir con todo eso, no se puede realizar ambas cosas. Si elijo una vida de deportista de rendimiento, el 99% es esfuerzo y el 1% es talento. Si lo busco por el otro lado, es difícil tener éxito”.

 

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