Troncos y Old John’s tuvieron un 2016 que será difícil de olvidar. Complejo recorrido vivieron en parte de la temporada, pero al final del año pudieron decir que cumplieron la misión. 

 

Carlos Ignacio Campos
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El rugby nacional tuvo como protagonistas a dos elencos que dejaron en alto al Bío Bío. Troncos y Old John’s recorrieron distintos caminos durante 2016 pero, tras una temporada con altos y bajos, tuvieron como factor común exitosos festejos. 

Forestales y británicos corrieron con dispar suerte en la fase regular del campeonato. Troncos, liderados por el sudafricano Philip Kellerman, realizó una impecable campaña clasificando una fecha antes del término al "Top 8", instancia que reunía a los mejores. "Habla de lo mucho que hemos crecido como club, siempre peleando instancias decisivas", dijo Felipe Burgos, hooker maderero. Old John’s, en tanto, y dirigido por Dalivor Franulic, lamentó no poder clasificar a esa liguilla, tras disputar seis duelos en su fase grupal, ganar uno, caer en cuatro e igualar el otro. "Nos pasó lo mismo por segundo año consecutivo, pero supimos reponernos y nos propusimos ganar la Copa de Plata", comentó Rafael Ruiz, centro de Old John’s. 

Frente en alto

Tres objetivos tenía Troncos en el año. El primero, ya estaba logrado. Clasificar a la Copa de Oro era una realidad. Ahora quedaban dos metas: llegar a semifinales y ser campeones. Paso a paso, pero con ilusión. El primer partido del "Top 8" ante Old Boys fue caída, pero dejó positivas sensaciones. El resto, casi sólo triunfos, sobre todo en Tineo Park, recinto llamado "Cementerio de los Elefantes" por el plantel forestal. Así, Troncos se hizo fuerte en casa venciendo a Universidad Católica y Country Club, entre otros. Victorias ante favoritos que clasificaron a los madereros a semifinales, consiguiendo el segundo objetivo del año y alimentando la ilusión por el título. "La campaña como local fue buenísima. Nos impusimos ante todos con gran superioridad y claridad. Ganamos siempre con bonus", recordó Daniel Jamett, capitán y símbolo forestal, respecto a una temporada donde Troncos terminó invicto como dueño de casa.

Old John’s, por su lado, sufrió tras no clasificar a la Copa de Oro, pero el plantel se fijó ir por la Copa de Plata y repetir el título de 2015. "Hubo un gran compromiso, seguimos entrenando y ‘hundiéndonos en el barco’ todos juntos hasta el final. Nunca bajamos los brazos independiente de las circunstancias que nos tocó pasar", señaló Rafael Ruiz. Y así fue, en una gran campaña donde mostraron un altísimo nivel, los británicos clasificaron a la final, instancia donde llegaron tras seis victorias y dos derrotas. El rival por el título era Alumni, que buscaba aguarle la fiesta a los pupilos de Franulic. 

Entre los mejores

Ya en semifinales, Troncos debía ganar dos partidos únicos para ser campeón. El primer rival era Old Boys como visita, ante el que ya habían caído en el debut del "Top 8". Parecía victoria abrochada para los penquistas, que se enredaron en la parte final. Patrick Muller, del local, tuvo en sus pies la clasificación a la final, pero increíblemente falló la conversión en el último segundo del partido. Forestales, de manera épica, estaban a sólo 80 minutos de ser campeones. "Estuvo muy buena esa patada final, ganamos al último segundo", dijo Jamett, respecto a una jugada que quedará en la historia del club. Eso sí, de aquella acción, Felipe Burgos comentó que "ese final lo borraría, porque casi nos dan vuelta el partido. Me dejó feliz haber llegado a la final, pero no nos preparamos para ganar así. Fue emocionante de todas formas". Así, Cobs era el último escollo para alcanzar la gloria. 

Por el cetro

Old John’s comenzó cayendo el choque decisivo ante Alumni y se pensó lo peor. Sin embargo, el quince británico sacó lo mejor de su juego y dio vuelta el partido. 32-25 fue la victoria para los rojos, que de la mano de Felipe Neira, Jean Recule, Rafael Ruiz, Alfonso Lepe y Benjamín Soto, entre otros, alzaron la Copa de Plata por segundo año consecutivo. Objetivo logrado. "Conseguimos lo que nos habíamos propuesto. Fue lo mejor que nos pasó en este año, haber logrado reponernos ante las situaciones adversas que nos pasaron", comentó Rafael Ruiz, centro del campeón de la Copa de Plata. 

En un recinto repleto en el Old Grangonian de Chicureo, Troncos salió mentalizado a frenar la imparable racha de un Cobs que barrió con todos sus rivales en la temporada. Pese a la gran campaña durante el torneo. forestales no pudieron. "Los primeros 25 minutos fueron lejos los peores que tuvimos en el campeonato, pero fue todo mérito de Cobs. Nos metieron 6 tries muy rápido, el partido se acabó a la media hora", recordó Burgos, acerca de un primer tiempo que finalizó 37-5 a favor del futuro campeón. Madereros mejoraron en la parte final y estrecharon el marcador 37-19. Cayeron en el último duelo, pero nada pudo ensuciar una temporada impecable que superó las expectativas de todos.

¿Qué fue lo mejor?

"Han sido tres años de solidez peleando arriba. Hemos crecido mucho como club, comentó Burgos, destacando desde el punto de vista deportivo que "hay que considerar que este fue el primer año con nuevo entrenador (Philip Kellerman). De local ganamos todos los partidos y los últimos tres de ellos fueron notables, mostramos un gran nivel de rugby. El capitán Daniel Jamett destacó que "por tercera vez consecutiva estamos entre los mejores equipos de Chile. Nos dejó muy contentos el año, porque llegar a la final de un campeonato tan largo requiere mucha garra, constancia, temple y disciplina. Fallamos en el partido final, pero puede pasar". Por el lado británico, Rafael Ruiz indicó que "quedamos contentos. Hay un dicho que dice que ‘no siempre puedes ganar todas las finales’, pero nosotros lo hicimos. Independiente de no haber clasificado a la Copa de Oro, sacamos adelante todos nuestros objetivos. Trabajamos siempre hasta el final". 

¿Y lo malo?

"Sin duda haber caído en la final fue lo peor, sin duda", coincidieron Burgos y Jamett, al momento de recordar lo negativo de esta temporada. "El planteamiento del partido no fue el adecuado, pero en general fue un gran año. Haber jugado otra final habla muy bien del trabajo que se está realizando deportiva e institucionalmente en Troncos", destacó Burgos. En Old John’s el lamento es único. "Nos dejó una espinita clavada no haber clasificado a la Copa de Oro", dijo Ruiz.

Cara nueva

Pensando en la próxima temporada, Old John’s ya cuenta con nuevo entrenador. El argentino Matías Newton se hizo cargo del cuadro británico, teniendo éxito tras dirigir los primeros encuentros preparatorios del elenco rojo, que los clasificó a un Seven en Reñaca en la quincena de enero. "Viene con muchas ganas, es muy empático, alegre, positivo y cree en el trabajo físico y compromiso", cerró Ruiz, respecto a las primeras semanas de trabajo del nuevo coach. 

¿Cuáles son los desafíos para 2017? 

Las metas e n Troncos y Old John’s son únicas. "Queremos jugar un mejor rugby y ganar la final", dijo Felipe Burgos. "Para ser campeón hay que ganarles a todos. Uno juega para eso y es entretenido pelear arriba. Hay que pensar como equipo grande, queremos seguir consolidándonos", indicó Daniel Jamett.

"¿Por qué no soñar pensar en salir campeones de la Copa de Oro?", afirmó Rafael Ruiz por el lado británico, agregando que "la idea es mejorar nuestro rugby. Debemos ser más maduros y aprender a nunca bajar los brazos. Hay que ganar siempre todo, nunca dar nada por perdido. Nada es fácil en esto". 

Será un año intenso, tras un 2016 donde quedó la vara alta.