Valdés contó detalles de la negociación que terminó en el traspaso de sus acciones. "Puse una cláusula, para asegurar que todo esté bien", advirtió. Rocío Yáñez, en tanto, habló del regreso de la "dupla dorada" al banco minero.
Valdés contó detalles de la negociación que terminó en el traspaso de sus acciones. "Puse una cláusula, para asegurar que todo esté bien", advirtió. Rocío Yáñez, en tanto, habló del regreso de la "dupla dorada" al banco minero.
Paulo Inostroza
paulo.inostroza@diarioconcepcion.cl
Faltaban diez días para que comience el torneo de Segunda y no se sabía nada de Lota. Se hablaba de desafiliación, del cupo que podía tomar Mejillones y hasta de una posible venta a un grupo argentino, después de la fracasada negociación con el grupo de Carlos Olave. Al final, Jaime Valdés decidió ceder sus acciones a su gerente general, Jorge del Campo. "Como nadie quería comprar Lota, se lo regalé, pero al menos sé que queda en buenas manos", sentenció.
Explicando la negociación, apuntó que "hubo ofertas de Olave, un grupo español y uno argentino, pero todos fueron descartados. Querían pagar poco y comprar recién el próximo año. Ninguno quería arriesgar, como arriesga cualquier empresario seguro de lo que hace. En algunos casos, pedí que si no había tanto dinero en efectivo, me dieran una garantía real… Como quien compra una casa. Ni siquiera eso. Puras ofertas vergonzosas".
¿Y cómo surgió la opción de Del Campo? Valdés explicó que "cuando vio que yo ya quería salirme, me hizo ver que él sería una buena alternativa administrando el club. Jorge no es de la zona, pero se encariñó con Lota, estuvo siempre en las prácticas y trabajó bien, más allá de los resultados deportivos. Yo premié su lealtad, pero ahora tendrá que armar su propio equipo de trabajo".
Valdés aseguró que los administrativos que trabajaban con él serán finiquitados y "Del Campo tendrá que contratar desde la secretaria para arriba. Es su equipo y él verá qué hace. Hay un montón de gente de la zona, incluyendo políticos que justo se andan alumbrando ahora que hay elecciones… Todos dicen que quieren aportar. Jorge decidirá quién le conviene y tal vez lleguen todos esos empresarios que no venían porque decían que Valdés era piedra de tope".
Pero puso una cláusula. "Yo confío en Jorge. Lo conozco. Pero también tengo claro que será un semestre muy complicado, donde costará más generar dinero y en el contrato dice que todo se anula si Lota Schwager queda endeudado. Yo se lo entregué saneado y nadie puede criticarme eso. Tampoco les saqué plata ahora que me salí del club, pero quiero que quede en buenas manos. Lo intenté con Bernardo Ulloa y en un par de meses ya estábamos con deudas y dos veces amonestados por la Anfp. Otra cosa es con guitarra", apuntó.
La "dupla dorada"
"¿En serio nos llaman así? A veces me da vergüenza tanto halago de la gente de Lota. Es imposible no encariñarse", expresó Rocío Yáñez, quien hoy retorna a la zona como ayudante técnico de Víctor González. La dupla que salvó a Lota milagrosamente del descenso vuelve a la carga.
Rocío comentó que "hay que cerrar el acuerdo, pero tenemos un pie adentro. Una de las cosas que pedimos fue mantener casi el 70 por ciento del último plantel y eso es porque no habrá tiempo para pretemporada. Este grupo ya se conoce y tiene una mecánica de juego. Eso ayudará mucho. Felizmente, todo este tiempo estuvimos en contacto con los jugadores y todos querían quedarse. Si algunos se fueron, como Díaz, Lara o Fuentealba es porque no se sabía nada del club. Hubo un par de días que, de verdad, pensamos que Lota se cerraba".
Dice que confían en Del Campo. "Él nos trajo y ha sido súper honesto con nosotros. Siempre nos dijo qué pasaba con el club, estábamos al tanto de lo de Olave, y su idea siempre era que siguiéramos. Lo que hizo el cuerpo técnico es apenas uno de las tantas variantes porque Lota anduvo tan bien y se salvó, pero la principal fue la convicción de los jugadores, identificación con la camiseta y ganas de salvar a Lota. Lo otro es la gente, la dirigencia, el fixture… Todo sumó y queríamos volver", apuntó.