Los creadores de las diversas disciplinas de la cultura y el arte, reaccionaron, desde sus respectivas visiones, sobre lo que dejó y trajo consigo el megasismo.De las propuestas, algunas continúan su marcha en la actualidad.
No cabe duda que fue un hecho que sacudió a todos y a todas las esferas de toda la sociedad, incluido el mundo cultural y artístico de nuestra zona.
Si bien el terremoto y posterior tsunami del 27/F de 2010 dejó varias cosas por el suelo y otras completamente destruidas, con el correr de los meses, los ánimos se fueron levantando y produciendo diversas expresiones de las artes que abordaron desde diferentes perspectivas lo ocurrido.
Es así como surgieron trabajos audiovisuales, ciclos de música, libros, exposiciones, obras de teatro, festivales y mucho más, en su mayoría basados u originados por lo ocurrido esa fatídica madrugada de febrero de hace diez años atrás.
Por su parte, uno de los aspectos más resentidos y de grandes daños por este movimiento telúrico, fue la infraestructura cultural, sobre todo la patrimonial. Espacios y reliquias históricas fueron abatidas, fracturadas y arrastradas por las inmensas olas generadas por el tsunami. Algo se recuperó con el tiempo, pero hubo cosas que se perdieron para siempre y otras aún están tal cual luego de ocurrida la tragedia.
Aunque no se realizó u organizó de manera instantánea, luego del terremoto/tsunami, sí se convirtió en una especie de símbolo y novedad la creación, en 2012, del Festival Viva Dichato.
Iniciativa musical cuyo sustento de creación fue el potenciar el aumento del empleo, reactivar la economía y mejorar el proyecto de reconstrucción de viviendas en la localidad costera de la Región. En su primera versión tuvo entre sus artistas destacados a Los Enanitos Verdes, José Luis Rodríguez y Américo.
Foto | Diario Concepción
El evento, de carácter masivo y popular, lleva a la fecha ocho versiones: tres televisadas por Mega, tres sin transmisión televisiva, una sacada al aire por TVU y la reciente, realizada el 8 y 15 de febrero, bajo el nombre “Viva Dichato 2020”, fue transmitida por TVN y tuvo en la animación a las duplas de Álvaro Escobar y Carmen Gloria Arroyo, y Gino Costa, junto a Carla Zunino. La parrilla, como es tradición, tuvo a un misceláneo número de artistas y humoristas, sólo nacionales.
Más allá de la música y el cine, lo ocurrido en el Bío Bío, y en cuatro regiones más del país, inspiró y fue el sustento para diferentes expresiones artísticas y del conocimiento.
Dentro de este último, se encuentra el libro “C/CF 2010-2011”, del Colectivo Concepción Fotográfica, el cual grafica, a través de diferentes autores, las preocupaciones sobre el habitar humano luego del terremoto.
Foto | Teatro Biobío
También destacado, aunque su estreno se realizó en abril del año pasado, es la segunda producción propia del Teatro Biobío, “Amanecerá con escombros bajo el suelo”, montaje que narra las historias de cinco sobrevivientes a la fatídica madrugada del 27/F. Obra que tuvo funciones también en el Teatro UC y que este 2020 proyecta más funciones, incluso, más allá del Bío Bío.
Según el catastro realizado en marzo de 2010 por el Consejo Nacional de Monumentos, específicamente en la Región, de los 25 inmuebles y monumentos históricos en zonas típicas catastradas, uno resultó destruido, nueve con daños mayores y tres con daños regulares.
A modo de emblema que afectó a este tipo de construcciones y objetos, y que aún es una postal de la ciudad de Talcahuano, es el museo flotante RAM Poderoso, el cual todavía permanece volcado y en espera de alguna solución. Más optimista es el panorama del Museo Pedro del Río Zañartu, que si bien sufrió daños en su estructura y parte de su colección, próximamente, y gracias a la adjudicación de unos fondos, pasará por un proceso de remodelación.
Foto | Raphael Sierra P.
Destacado en este sentido es lo que ocurrió con el ex Teatro Dante, el que antes del 27/F tenía proyectado el ser reacondicionado y restaurado en su totalidad, pero a causa del daño que sufrió, sólo su fachada sirvió para el ahora Centro Cultural ex Teatro Dante de Talcahuano.
Habían pasado tan sólo un par de meses de los trágicos sucesos, con los servicios básicos restablecidos a medias y bajo constantes réplicas, y el ciclo Tras Bambalinas abrió sus puertas a la bullante escena musical penquista.
Encabezado y producido por el reconocido músico Mauricio Melo, en sus 101 capítulos o sesiones que tuvo de duración (mayo del 2010 hasta el 2012), el espacio se convirtió en todo un hito dentro de la bohemia local, ya que fue una especie de “laboratorio” de varias bandas en formación y el empujón para otras ya conocidas.
“Habían pasado tan sólo un par de meses, la gente muy ávida de catarsis, todos con ganas de verse de nuevo. Se generó un tremendo movimiento tras el Bambalinas, surgieron bandas como Niño Cohete, Mantarraya y Julia Smith consolidó su camino. Contentos de haber hecho este gran invento, que no fue sólo música, sino que también tuvimos teatro, literatura y hasta una charla de astronomía”, contó Melo.
Tan emblemático como el ciclo en sí fueron los escenarios en donde se realizaron las eclécticas y creativas sesiones, ya que, de ellas, entre 63 y 64 tuvieron lugar en la ex Sala Dos, para luego hacerse en Al Paso (ex local de comida abajo del Teatro UdeC) y concluir en La Puerta Roja (actual Maldita Sea).
Foto | Cedida
También en el ámbito musical destacó la creación de la canción “Perdón Madre Tierra”, del actual cantante de Mister O, Andrés Oreña. El tema es una vivencia de lo ocurrido aquella trágica madrugada.
Precisamente, en este nuevo y especial aniversario de la tragedia, se liberará este track -en diversas plataformas digitales de música- regrabado con músicos de Mister O, Cianuro, Mendigos del Sol, K.S.B, 7 Puntas y Lover Under Cover (Suecia).
Prolíficas fueron las reacciones del mundo audiovisual en relación al terremoto, ya sea en formato de larga duración como de documental.
A modo de ejemplo, el audiovisualista y cineasta Ricardo Gómez Cruz creó, a partir de un mediometraje llamado “Tsunami”, un documental de nombre “Pacífico” y que contó con financiamiento vía campaña crowdfunding.
En el área de grandes producciones se hicieron las cintas “El año del tigre” (2011), dirigida por el reconocido Sebastián Lelio (“Una mujer fantástica”) e inspirada en lo que pasó con las cárceles luego del terremoto;“Aftershock” (2012), dirigida por Nicolás López y protagonizada por Eli Roth, ficción que se basó en lo ocurrido esa madrugada del 2010.
Foto | Captura
Mientas que “3:34, Terremoto en Chile” es una de las cintas más recordadas en este sentido, tanto por lo estremecedor y fiel a la realidad de las historias que se narran.