La cantante penquista habló sobre sus inicios, sus influencias y opinó de la contingencia. Además, dio adelantos acerca de sus próximos trabajos y ambiciones fuera del ámbito musical.
Por: Sergio Silvestre De la Fuente
Daniela González, mejor conocida como “Dulce y Agraz”, es una de las exponentes penquistas que está dando que hablar. Con un disco de estudio, múltiples sencillos y presentaciones en importantes escenarios, tanto en Chile como en otros países de Sudamérica, es, sin duda, uno de los diamantes en bruto en el escenario nacional.
Su pasión por la música comenzó a temprana edad, formando parte de diferentes proyectos, donde incluso sacó un EP en 2015 con su primera banda, No te Dispares a los Pies. Y un año después, comenzó a trabajar en su carrera como solista, la que desde ese momento ha ido en ascenso.
“Mis papás son músicos, así que técnicamente siempre estuve con ese mundo. Si bien no pensaba en dedicarme a la música, llegué a un punto donde me di cuenta que el arte despertaba en mí ciertas pasiones que no veía en otras profesiones”, comenta la intérprete.
Desde inicios de su carrera, Dulce y Agraz ha sabido convivir con una agenda repleta de eventos en todo el país, sacando material año a año y realizando diferentes trabajos con actores del escenario actual.
“Ahora estoy viviendo mi carrera a mi propio ritmo, no creo en una versión tiránica del éxito, no tengo por qué apurarme en mis procesos, me gusta disfrutar los momentos en esta profesión. Este proyecto es para crecer personalmente, resolver inquietudes artísticas”, explica.
“No me alcanza” y “Ya no retoña” fueron los sencillos que lanzó en 2019, teniendo una gran recepción del público y anticipando posibles proyectos para este año. En cuanto al método de creación, González lo ve como un desafío propio.
“Es un proceso personal, escribo y compongo mis canciones, y cuando están listas las comparto con mis productores y vamos armando los trabajos”, agrega.
Además, adelantó algunos detalles sobre sus proyectos para este 2020. “El 6 de marzo voy a liberar un single, ‘La piel’. Después de eso, tengo planeado sacar un EP, que no tiene fecha de estreno pero está planeado para este año”, declara.
Sin duda, uno de los eventos que marcará la carrera de la cantautora será su presentación en el Lollapalooza Chile, siendo la única representante de la zona en participar del reconocido festival.
“Siento que vino a sacarme de la monotonía en cierta manera, después del estallido social. Y me hizo retomar el ritmo de los shows en vivo. Ha sido un proceso muy interesante preparar este show”, señala.
Son múltiples los nuevos representantes de la música chilena, con géneros como el trap o el pop, que han logrado quedar en el oído de la audiencia. En ese marco, reconoce la importante de sus colegas.
“Para mí, que artistas como Gianluca o Princesa Alba existan significan que yo también existo. Son mis coetáneos y su trabajo también es importante para mi desarrollo como artista”.
La cultura, en especial la música, han sido un frente de expresión en tiempos de crisis, donde la artista ocupa los escenarios para mostrar su sentir desde la vereda del arte.
“El estallido nos tocó a todos, en lo personal la contingencia la percibí desde una perspectiva humana. De cierta manera, esto nos dijo que debemos mirar al otro para apoyarlo. En mis shows, siempre trato de entregar mensajes relacionados con este tema, que tenemos necesidades colectivas, integrando poemas de Miguel Zurita o de Carmen Berenguer, que puedan dar un mensaje potente”, expresa.
Otra de las pasiones que mueven a la joven artista es la literatura. Con inspiraciones de autores y autoras nacionales, González da señas sobre su acercamiento con el arte escrito.
“Últimamente, me estoy relacionando con la poesía y la literatura. Y siento que mi carrera musical también va en esa dirección, mi estilo es el pop, pero unido a una lírica. Siento que mis ambiciones, tanto como artista como persona, están puestas en ese ámbito”, dice.
Por último, cuenta sobre sus múltiples influencias.
“Si bien tengo muchos autores que me fascinan, pero entre mis mayores referentes están Gabriela Mistral, Carmen Berenguer y Cecilia Vicuña”, finaliza.