En abril del año pasado, cada una de sus partes fueron retiradas de la entrada de la sala de cámara del Teatro Biobío, con la finalidad de entrar en un proceso de mantención y conservación. Un laborioso camino, que ayer dio su primer paso para su esperada reposición.
En las instalaciones locales del Ministerio de las Culturas tuvo lugar la presentación del nuevo aspecto que tendrá “Bendigo las creaciones”, tapiz realizado el 2017 por bordadoras de diferentes puntos del país, con motivo del centenario de Violeta Parra y, posteriormente, donado al Teatro Biobío.
“Estamos en el hito de lanzamiento del proyecto de puesta en valor del tapiz mural ‘Bendigo las creaciones’, el cual estaba instalado en la entrada de la sala de cámara del Teatro Biobío y que tuvo que ser retirado para una adecuada conservación, en virtud de las condiciones climáticas del espacio. Es decir, estaba ubicado en un lugar con excesiva temperatura y luz, lo que, finalmente, terminaría por dañar de forma irreversible esta gran pieza”, comentó Carolina Tapia, seremi de las Culturas.
Proceso que cuenta con un financiamiento de $30 millones, cifra que contempla tanto su limpieza como reposición en condiciones adecuadas y óptimas, perpetuando su durabilidad.
Con más detalle y en palabras de Cecilia Guevara Mendoza, encargada del área de Artesanía de la seremía de cultura penquista y quien ha encabezado el proyecto, “esta reinstalación tiene que ver con la puesta en valor de la obra, lo que significa que será trabajada bajo las mejores condiciones y estándares de calidad que existen en el país. En este sentido, esperamos realizar su ceremonia de reinauguración de la postura de la obra para la primera quincena de mayo. Esto, debido a que el proceso de unión de los paños -86 en total- conlleva todo un aparataje técnico y material, además de ser contenido por una vitrina exhibidora, que ya es, de por sí, sumamente difícil de instalar”.
Fuera de esta placa transparente especial, “Bendigo las creaciones” tendrá un texto en diversos idiomas y lenguaje inclusivo. “Su explicación estará en español, inglés y mapudungún, además de lenguaje braille. Con esto propiciamos que este destacado trabajo sea accesible a la mayor cantidad de personas”, añadió Tapia.
Para Francisca Peró, directora ejecutiva del Teatro Biobío, es de gran valor poder volver a contar con esta gran obra, ya que “es un icono para nuestro espacio. El público que la pudo ver instalada durante el año que estuvo, lo mismo que quienes participaron de las visitas guiadas, aún nos preguntan por la obra. Estamos muy contentos y pensamos en realizar futuras actividades en torno a este regalo de las bordadoras”.
Todo el proceso de génesis del proyecto, ejecución, desmontaje y reinauguración, quedará materializado en un libro catálogo, que se entregará al momento de reinstalar el tapiz.