Se trata de un antiguo anhelo que ya se construye por etapas y que es un desafío además en materia de ingeniería . Por ahora, el MOP ejecuta una inversión de $8 mil millones en el tramo Ralco-Palmucho, y trabajará en expropiaciones para su avance durante este segundo semestre.
Al final de la página 36 y en las primeras líneas de la página 37 del documento que agrupa todas las iniciativas de los distintos ministerios que formaron parte del Mensaje Presidencial de su la Cuenta Pública, referido específicamente a la Región, se menciona el desarrollo del proyecto de la ruta que busca unir Ralco, en el Alto Biobío con Lonquimay, en La Araucanía.
Una idea que se transformó en anhelo hace años y que está dentro las iniciativas que pretende mejorar las condiciones de movilidad en la cordillera de esta parte de la Región como también generar una vía que permitan el desarrollo de rubros como el turismo.
Y en este sentido, desde el Ministerio de Obras Públicas, el seremi Hugo Cautivo, explicó en qué consiste este proyecto, que aclaró se desarrollará por etapas y que en la presente administración se avanzará en las primeras dos.
“Recordar en este sentido lo que ya hoy día se está ejecutando en el sector en Ralco y Palmucho, precisamente, en el Alto Biobío, que ha significado que tengamos en ejecución en este minuto un contrato por una inversión superior a los 8 mil millones de pesos que está consolidando estándares desde el punto de vista de lo que son los puentes ubicados en esta área, específicamente con la denominación de Endesa 1, 2 y 3, y también con lo que es la base que tiene hoy día del punto de vista el camino”, sostuvo el jefe regional del MOP.
“Lo que se anunció de lo que viene como segunda etapa tiene que ver con la proyección de esta ruta más allá de Palmucho, y en esta área lo que hemos estado trabajando y proyectamos para el segundo semestre es seguir avanzando en materia de expropiaciones, en las cuales ya llevamos una inversión superior a los 1.600 millones de pesos”, explicó Cautivo.
Respecto de esta proyección de los trabajos que actualmente se desarrollan como primer eslabón de esta futura ruta, la autoridad regional aseveró que significará un desafío importante en materia logística e ingenieril.
“Vamos a comenzar con una siguiente etapa que tiene que ver con aquellos lugares de mayor complejidad por las condiciones que tiene la ruta. En ese sentido tenemos intervenciones consideradas en la cuesta Zeta, en la cuesta El Pelán, en la cuesta El Barco-El Coihue, en la cuesta El Coihue-Guayalí y por tanto con una iniciativa que va a bordear seguramente los 8.000 millones de pesos específicamente”, afirmó el seremi de Obras Públicas.
Desde la delegación provincial de Biobío resaltó la mención presidencial a este proyecto y a su continuidad, por los positivos efectos que se entiende generaría el desarrollo de esta iniciativa para un sector que no siempre ha sido prioridad en materia de inversión pública, expresó Jacqueline Cárdenas, delegada provincial (s).
“Valoramos que el Presidente Gabriel Boric haya mencionado este gran proyecto en su cuenta pública como uno de los hitos más importantes en cuanto a infraestructura para la Región del Biobío, y esto por la conexión vial y también cultural que conlleva esta obra al unir la provincia de Biobío con la Araucanía y a través de las comunidades Pehuenche de nuestra cordillera”.
“En ese sentido entendemos que el desarrollo turístico y social que esta ruta aportará a la zona de Alto Biobío será realmente significativo, considerando también que aquí estamos poniendo énfasis a comunidades que habían sido postergadas por el Estado”, cerró Cárdenas.